Jane Austen.

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Nacida en una familia de clérigos, Jane Austen fue la séptima de ocho hermanos. Su infancia transcurrió en un entorno que fomentó su amor por la literatura y el arte de contar historias: su padre, el reverendo George Austen, y su madre, Cassandra Leigh, proporcionaron a sus hijos una educación centrada en la lectura y el pensamiento crítico. Recibió instrucción en el hogar y en una escuela de Reading, donde cultivó su talento literario. "El arte de la novela es una exploración de la vida misma", definió la joven escritora en una carta de 1817. Tres de sus hermanos varones ingresaron en el ejército, lo que hizo que Jane tuviera un amplio conocimiento de la vida en el regimiento, como muestra en obras como Orgullo y prejuicio. Desde temprana edad Jane concibió obras que no solo entretenían, sino que también satirizaban las convenciones sociales de su tiempo, la época de la Regencia, entre el período georgiano y el victoriano. Influida por autores como Samuel Johnson y Frances Burney, a los quince años empezó a escribir y desarrolló un estilo singular, cuya principal característica es su aguda capacidad para observar las relaciones humanas y el profundo entendimiento de la condición femenina. Concebida a mediados de la década de 1790, Lady Susan es una novela epistolar que revela las intrigas amorosas de una joven viuda que manipula a las personas y situaciones a su alrededor con astucia. Aunque menos conocida que sus novelas posteriores, esta pieza muestra el humor irónico y la perspicacia que se convertirían en sellos distintivos de su narrativa. El contexto social de Austen estaba marcado por grandes restricciones para las mujeres, lo que limitaba sus oportunidades educativas y profesionales. A pesar de no haberse casado, Austen utilizó sus experiencias personales y su entorno familiar para tejer relatos sobre las complejidades del amor, la estrechez de las doctrinas morales de su época y la dura estratificación social en la Inglaterra del siglo XVIII.