Allie Reynolds practicó snowboard y quedó entre las diez primeras clasificadas de Reino Unido en la modalidad de estilo libre en medio tubo. Durante su carrera deportiva, pasó cinco inviernos entrenando y compitiendo en las montañas de Francia, Suiza, Austria y Canadá. Ha tenido multitud de empleos y ha sido niñera, camarera, profesora de educación primaria en Londres, asistente en una librería y hasta profesora de francés y traductora. En 2003, cambió la tabla de snowboard por una de surf y se fue a vivir a Gold Coast, en Australia, donde trabajó como profesora de inglés durante quince años. En 2018, Allie decidió dar un cambio a su vida y dedicarse por completo a la escritura. Ha publicado relatos en revistas femeninas de Reino Unido, Australia, Suecia y Sudáfrica. Tiene dos niños pequeños y un gato que se cree un perro. La bahía es su segunda novela, y la primera, Temblor, se publicó en más de veinte idiomas.