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¿Sueles ser preso de tus emociones? ¿Sueles reaccionar de manera impulsiva? ¿No sabes cómo canalizar tus emociones y terminas por explotar al final? Entonces continúa leyendo...
"Cuida tus pensamientos, porque se convertirán en tus palabras. Cuida tus palabras, porque se convertirán en tus actos. Cuida tus actos, porque se convertirán en tus hábitos. Cuida tus hábitos, porque se convertirán en tu destino". - Mahatma Gandhi
Aunque no lo creas, lo que podría interponerse entre tú y lo que sea ese "algo", eres tú mismo/a, o más específicamente, tu forma de pensar y tu poca habilidad para controlar tus emociones.
Nuestra programación (sistema de creencias) nos puede llevar a tener pensamientos específicos y su vez, estos pensamientos generan emociones que nos orillan a realizar acciones concretas. Estos sistemas de creencias muchas veces nos acompañan hasta nuestra vida adulta sin sufrir grandes cambios.
Esto quiere decir que, la mayoría de las personas no cambian sus creencias sobre el mundo, rara vez cuestionan lo que creen y, en cambio, se comportan como si sus puntos de vista fueran completamente correctos.
Lamentablemente, esa falta de cambio en nuestro sistema de creencias nos puede conducir a un descontrol de nuestras emociones y una vida infeliz. Entonces ¿cómo podemos dominar nuestras emociones para una vida más plena?
Este libro te ayudará a identificar y transformar las creencias limitantes que te están bloqueando de todas las abundantes posibilidades que te esperan, para que puedas tomar en serio lo que quieres y tomar medidas para que suceda.
En este libro, descubrirás:
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Introducción
1. Analiza la forma en que piensas y miras el mundo
2. Cómo funciona el cerebro
3. La relación entre pensar demasiado, ansiedad, estrés y pensamientos negativos
4. Cómo afrontar la depresión
5. Fuerza mental: alta tolerancia a la frustración
6. Disfruta de tu empatía
7. Realinear tus niveles de confianza con tus habilidades
8. Pensamiento positivo
9. El poder del pensamiento positivo
10. Ley de atracción a través del control de tu mente
11. Las herramientas que necesitas
12. Establecimiento de metas
13. Creando hábitos en torno a sueños y metas
14. Mejora tu actitud
15. Disfruta de tu vida
Conclusión
Algo falta en tu vida, algo que tu alma anhela, algo más grande y tremendamente abundante que te espera a la vuelta de la esquina. Lo único que se interpone entre tú y lo que sea que sea ese "algo", eres tú mismo/a, o más específicamente, tu forma de pensar y tu poca habilidad para controlar a tu mente. Este libro te ayudará a identificar y transformar las creencias limitantes que te están bloqueando de todas las abundantes posibilidades que te esperan, para que puedas tomar en serio lo que quieres y tomar medidas para que suceda.
No te preocupes, te voy a dar las herramientas que necesitas para hacerlo todo con facilidad. En el camino, también aprenderás a vencer la ansiedad, la depresión, los pensamientos negativos, la falta de atención, entre otros problemas.
Al hacerlo, serás mucho más feliz y, como resultado, podrás sacar más provecho de la vida. No puedes hacer un esfuerzo adicional y transformar tu vida sin cambiar tu sistema de creencias, que es como un programa que se ejecuta en segundo plano sin tu conocimiento y determina lo que es posible para ti.
Estoy emocionado y honrado de comenzar contigo este viaje, mi mayor deseo es que la información contenida en esto sea tan transformadora para ti como lo ha sido para mí y para las muchas personas con las que he tenido el privilegio de compartirla.
Quizás te preguntes qué tipo de impacto tendrá esto en tu vida. Todo lo que puedo decir es esto: ¡pruébalo! Haz un esfuerzo bueno, honesto y constante. Una vez que comiences a sentir un cambio en tu mentalidad, podrás presenciar cómo tus deseos comienzan a manifestarse justo ante tus ojos y comenzarás a ver lo que solo puede describirse como milagros sucediendo en todas partes. En general, aprenderás cómo puedes ser una mejor persona, cómo puedes ser la mejor versión de ti mismo/a.
Este libro te enseñará cómo practicar el pensamiento positivo, cómo controlar tus pensamientos, cómo la autodisciplina puede ayudarte y cómo usarla para tomar mejores decisiones.
Por supuesto, todos tenemos fortalezas y debilidades que cambiarán con regularidad, es crucial perfeccionar y mantener tus fortalezas mientras trabajas en tus debilidades; siempre hay más que aprender, y es genial adquirir conocimientos sobre algunos buenos hábitos para implementar y trucos para mejorar tu vida.
Tu programación (sistema de creencias) te lleva a tener pensamientos específicos y estos pensamientos generan emociones que te obligan a realizar acciones concretas. La mayoría de las personas tienen sistemas de creencias completamente formados una vez que alcanzan la edad adulta y, por lo general, mantienen los mismos por el resto de sus vidas. Nunca cambian sus creencias sobre el mundo, rara vez cuestionan lo que creen y, en cambio, se comportan como si sus puntos de vista fueran completamente correctos.
Lo que quiero es que cuestiones lo que sabes, identifiques tu sistema de pensamiento, reconozcas las emociones que éste genera en ti y logres controlarlas para pensar de manera positiva y comenzar una etapa de vida más tranquila, estable y que te permita alcanzar las metas que te propongas. Te doy la bienvenida a un viaje alucinante.
De acuerdo con muchos psicólogos, el pasado tiene un impacto directo en tu vida actual. Comenzaremos por explicarte cómo conocerte a ti mismo/a y las diversas formas en que tu pasado influye en tu comportamiento presente, además de cómo manejar tu pasado en el presente.
Cómo el pasado afecta tu presente
Cuando te embarcas en un viaje para conocerte y controlarte a ti mismo/a para vivir una vida plena, necesitas investigar primero el desorden de tu pasado. El desorden en tu pasado puede actuar como obstáculos en la vida actual, impidiéndote seguir adelante.
Es probable que tus experiencias de hoy también hayan sido influenciadas por tus experiencias pasadas y la forma en que actúas o interactúas con otras personas hoy en día es tal vez como resultado de eventos en tu infancia o vida adulta.
Es esencial comprender la conexión entre tu presente y tu pasado y cómo este pasado influye en tu futuro o presente. Es probable que diferentes eventos, sin importar cuán grandes o pequeños hayan sido, influyan en tu vida actual y tu futuro, tu personalidad y comportamiento hoy pueden ser el resultado de experiencias pasadas.
Los psicólogos dicen que los niños pueden absorber información tan rápido que a la edad de 6 años ya se han formado algunas creencias; durante tu niñez y vida adolescente, es probable que hayas formado muchas creencias, y estas han influido en tu personalidad y comportamiento en la actualidad. Es probable que las creencias que formaste en tu vida anterior influyan negativa o positivamente, pero también es posible cambiar tus creencias negativas y transformar tu vida, aunque no es fácil y requiere mucha paciencia y disciplina.
Cambia tus creencias para controlar tu comportamiento
Puedes preguntarte cómo es posible cambiar tus creencias. Primero, comienza reconociendo las creencias que han moldeado tu personalidad a lo largo de los años, al hacerlo, es hora de profundizar en tu pasado e identificar qué te lleva a formar esas creencias. Esto no es fácil de hacer porque es posible que no hayas sido consciente de que estabas formando fuertes creencias, por lo que te podrías sentir impotente ante ellas. Sin embargo, una vez que puedas llegar a la raíz de por qué formaste ciertas creencias, será más fácil lidiar con ellas.
Identificar y comprender cómo se formaron es lo que te da el poder de liberarte de su dominio. Para entenderlo mejor, considera la siguiente escena: supón que tu jefe se queja de que tu desempeño estuvo por debajo del promedio y no te desarrollaste como se esperaba. Dice que espera un mejor desempeño el próximo mes, ¿no querrías saber qué salió mal y cómo sucedió esto, para poder solucionarlo? Esto se aplica también a tu comportamiento, si no comprendes qué causó que te comportaras de cierta manera, entonces será imposible cambiarlo.
Esta es la razón principal por la que, para cambiar y comenzar a vivir una vida libre de negatividad, debes identificar la influencia de tu pasado en tu mente.
Investiga cómo se formó y de dónde vino, entonces podrás lidiar con ese desorden y transformarte a ti mismo/a.
Puede que no seas consciente de por qué tienes cierta personalidad o te comportas de alguna manera en específico. Si realmente deseas cambiar tu vida para bien, necesitas un propósito que te motive a cambiar tu mente y la aleje de los pensamientos negativos, pero debes comprender tu vida en su totalidad para poder lograrlo.
Psicología: comprender, aceptar, curar el pasado, comprender el presente
Toda persona tiene un pasado y algunas personas han tenido pasados más dolorosos que otros o recuerdos más agradables de éste. Se sabe que las experiencias pasadas influyen en tu vida o comportamiento actual, la mayoría de los pasados dolorosos dejan a las personas con remanentes de dolor debido a alguna experiencia traumática que tuvieron.
Algunas personas, para lograr lidiar con sus recuerdos dolorosos, optan por reprimirlos con la esperanza de olvidar la experiencia traumática, o se adentran en comportamientos destructivos como comer en exceso, mantener problemas de ira, beber, aislamiento y muchos más. Curarse de esto no es fácil, sin embargo, es posible y factible; hay algunos pasos o estrategias que te ayudarán en tu camino, como los siguientes.
Evalúa tus experiencias: debes afrontarlas porque no puedes negarlas. Permítete abrirte a pensamientos, experiencias internas y emociones. Elige un aspecto de alguna experiencia, medita en él y observa lo que te hace sentir; puede que experimentes sentimientos o emociones variadas hacia éste. Esto te ayudará a comprender la incidencia de ese evento en ti. Sé tolerante y compasivo/a: mientras meditas a través de tu experiencia, intenta comprenderla y sentir empatía por ella. Esto te permite ser compasivo/a contigo mismo/a, y aliviar tus desafíos emocionales; te ayuda a comprender la experiencia, aceptar que sucedió y perdonarte a ti mismo/a por ello. Tómate un descanso, es importante: no es fácil afrontar tus dolores y miedos; se necesita mucho coraje, pero deberías moverte con cautela, presta atención a las experiencias que no llegan a ti inmediatamente. Cuando te sientas abrumado/a por las emociones, es recomendable hacer una pausa; cuando te sientas mejor, reanuda. La clave es intentar aumentar la conciencia de tu persona a un ritmo tolerable. Cálmate: para calmarte, aprende a respirar conscientemente, concéntrate en tu respiración mientras bloqueas todo lo demás. También puedes decidir participar en una actividad positiva como el ejercicio, que alivia enormemente el estrés. Reúne todo: este es el punto en el que para curar el dolor pasado, debes reconocer tu existencia. Reconoce el dolor, acéptalo y sé compasivo/a con él. Notarás que comienzas a desarrollar una autoconciencia más profunda sobre la experiencia mientras aumentas tu tolerancia sobre ella. A medida que avances, aprende a reconocer cuándo te estás acercando al límite de lo que puedes manejar y cálmate en ese punto.Cuando hagas esto, te darás cuenta de que es posible que no cambies la forma en que te relacionas contigo mismo/a y que tu dolor en el pasado puede que no cambie, pero cambiará tu experiencia, permitiéndote seguir adelante con una actitud más positiva en tu vida.
La importancia de reconocer y romper patrones de pensamiento negativos
Que una persona forme un cierto hábito a partir de las cosas rutinarias que hace, puede convertirse en una herramienta mental muy poderosa. Reconocer y tratar el proceso de pensamiento de un individuo no es fácil: si existen pensamientos negativos que provienen de depresión, ansiedad, fobias u otras condiciones mentales, se vuelve más complicado controlarlos y cambiarlos.
Los pensamientos negativos se comparan pequeñas heridas que una persona continúa encontrando cuando no tiene idea de cuál es la causa. A veces, una persona no se da cuenta de que tiene pensamientos negativos hasta que comienzan a afectar su vida. Dependiendo de los factores desencadenantes y la condición de un individuo, necesitarán varios enfoques de psicoterapia, medicamentos y cambios en el estilo de vida; si la terapia no se incluye como parte del tratamiento, puede ser mucho más difícil para una persona obtener un cambio eficiente.
Una forma en que una persona puede romper con su patrón de pensamiento negativo es haciendo un cambio mental gradualmente.
Cambiar tu forma de pensar significará que serás consciente de los pensamientos negativos y tomarás una decisión consciente para cambiarlos.
Examina cómo reflexionas sobre diferentes situaciones o lo que piensas sobre alguna situación en particular, e intenta cambiar tu enfoque hacia alguna otra cosa. Esto requiere deshacer los comportamientos negativos y cómo has programado tu mente a través de las cosas aprendidas. Por ejemplo, si mientras crecías te dijeron que debías ser el/la mejor en la vida y en la escuela, es posible que hayas programado tu mente para el perfeccionismo. Esto puede ser muy estresante y hacer un cambio mental es una excelente manera de luchar contra el estrés y la ansiedad. Debes identificar tus patrones de pensamiento más frecuentes, reconocer los pensamientos negativos y cómo puedes redirigirte para tener pensamientos constructivos.
¿Cómo reconocer tus pensamientos negativos?
Los pensamientos del "deber ser"
Cuando te das cuenta de que tus pensamientos están rodeados por la palabra "debería", debes detenerte y analizar. Por ejemplo, pensamientos como: “debería sentirme/hacer algo/actuar mejor”, “debería ejercitarme todos los días”, “debería cambiar mi forma de comer”, “debería cambiar mi forma de pensar”…
Las intenciones detrás de estos pensamientos son nobles, de acuerdo con la situación, podría ser más saludable hacer ejercicio y comer alimentos integrales. La palabra "debería", sin embargo, puede causar pensamientos de culpabilidad y hacer que tengas más pensamientos negativos.
Los PNA
Además de los pensamientos del "deber ser", estaría bien reconocer otros patrones que te conducen automáticamente a pensar de manera negativa. Detrás de las declaraciones del "debería", es posible tener otras distorsiones cognitivas en el pensamiento negativo. Estas se denominan “Pensamientos Negativos Automáticos” (PNA).
Cuando tienes una reacción o sentimientos fuertes hacia algo, los PNA son tus pensamientos iniciales; son más reflejos que pensamientos libres. Los PNA son aprendidos y muy persistentes, en su mayoría repiten temas como fobias o peligro, además de que son muy comunes en personas con pensamientos depresivos o ansiosos; por ejemplo, hacen que las personas ansiosas se aceleren, convirtiendo sus pensamientos en graves ataques de pánico. Desafortunadamente, reconocer las PNA no es fácil, mucha gente los ha tenido toda su vida y no lo sabe.
Piensa en alguna situación actual y tu actitud o estados de ánimo hacia dicha situación, ¿qué pensamientos o imágenes te vienen a la mente en ese momento? Una vez que establezcas esto, debes dirigir tus pensamientos a otros más productivos, más sabios o más útiles.