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Yo acuso es una carta escrita en enero de 1898 por el escritor francés Emile Zola en reacción al caso Dreyfus, un caso que conmocionó a la sociedad francesa a fines del siglo XIX. En este texto, Zola hace un llamamiento público al entonces presidente Félix Faure. Afirma que Alfred Dreyfus, un judío alsaciano, fue acusado erróneamente de haber revelado información a Alemania. Repite la sentencia que condena a Dreyfus a cadena perpetua en la Isla del Diablo en la Guyana Francesa. Acusa al gobierno francés de encarcelamiento ilegal y antisemitismo. Zola es muy consciente de que, al escribir este texto, va en contra de la ley de 1881 sobre la libertad de prensa y que él mismo será demandado por este motivo. Sin embargo, su carta es exitosa y la oración de Dreyfus se revisa unos meses después. Debido al compromiso de su autor y los resultados que ha traído, este texto de Zola simboliza el poder de la prensa n la defensa de los derechos humanos y la verdad. -
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Seitenzahl: 23
Veröffentlichungsjahr: 2021
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Émile Zola
Saga
Yo acuso
Original title: J'Accuse
Original language: French
Copyright © 1898, 2021 SAGA Egmont
All rights reserved
ISBN: 9788726521030
1st ebook edition
Format: EPUB 3.0
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This work is republished as a historical document. It contains contemporary use of language.
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1898
París, 13 de enero de 1898
Carta a M. Félix Faure
Presidente de la República Francesa
Señor: Me permitís que, agradecido por la bondadosa acogida que me dispensasteis, me preocupe de vuestra gloria y os diga que vuestra estrella, tan feliz hasta hoy, esta amenazada por la más vergonzosa e imborrable mancha?
Habéis salido sano y salvo de bajas calumnias, habéis conquistado los corazones. Aparecisteis radiante en la apoteosis de la fiesta patriótica que, para celebrar la alianza rusa, hizo Francia, y os preparáis a presidir el solemne triunfo de nuestra Exposición Universal, que coronará este gran siglo de trabajo, de verdad y de libertad. ¡Pero qué mancha de cieno sobre vuestro nombre -iba a decir sobre vuestro reino- puede imprimir este abominable proceso Dreyfus! Por lo pronto, un consejo de guerra se atreve a absolver a Esterhazy, bofetada suprema a toda verdad, a toda justicia. Y no hay remedio; Francia conserva esa mancha y la historia consignará que semejante crimen social se cometió al amparo de vuestra presidencia.
Puesto que se ha obrado tan sin razón, hablaré. Prometo decir toda la verdad y la diré si antes no lo hace el tribunal con toda claridad.
Es mi deber: no quiero ser cómplice. Todas las noches me desvelaría el espectro del inocente que expía a lo lejos cruelmente torturado, un crimen que no ha cometido.
Por eso me dirijo a vos gritando la verdad con toda la fuerza de mi rebelión de hombre honrado. Estoy convencido de que ignoráis lo que ocurre. ¿Y a quién denunciar las infamias de esa turba malhechora de verdaderos culpables sino al primer magistrado del país?
Ante todo, la verdad acerca del proceso y de la condenación de Dreyfus.