Urbanismo Ecológico. Volumen 1 -  - E-Book

Urbanismo Ecológico. Volumen 1 E-Book

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Si bien el cambio climático, la arquitectura sostenible y las tecnologías ecológicas son cuestiones perfectamente asentadas en el imaginario colectivo, no ha ocurrido lo mismo con aquellos temas que afectan a la sostenibilidad de la ciudad. Este libro nace precisamente de la apremiante necesidad de abordar el urbanismo desde un enfoque ecológico como método práctico e imaginativo para enfrentarse a la realidad de la ciudad, y constituye, por ello, una apuesta deliberada por asentar definitivamente el concepto de ?urbanismo ecológico? a través del compendio de una serie de textos clave sobre la materia.

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1 Influenciado en parte por su colaboración con Roberto Rossellini en Roma, ciudad abierta (1945), la película de Federico Fellini muestra la dura realidad de la Roma de posguerra, sus habitantes y sus enredos.

2 The Guardian, Londres, 1 de junio de 2007.

3 Bateson, Gregory, Steps to an Ecology of Mind [1972], University of Chicago Press, Chicago, 2000, pág. 491 (versión castellana: Pasos hacia una ecología de la mente, Carlos Lohlé, Buenos Aires, 1985). Bateson continúa diciendo: “Solíamos pensar en una jerarquía taxonómica –individuo, linaje familiar, subespecie, especie, etc.– como unidades de supervivencia. Ahora vemos una jerarquía de unidades diferente: gen en organismo, organismo en entorno, ecosistema, etc. En su sentido más amplio, la ecología viene a ser el estudio de la interacción y supervivencia de ideas y programas dentro de circuitos (por ejemplo, diferencias, complejos de diferencias, etc.)”.

4 Guattari, Félix, Les Trois écologies, Éditions Galileé, París, 1989 (versión castellana: Las tres ecologías, Pre-Textos, Valencia, 1996, págs. 9-10).

5 Lefebvre, Henri, Le Droit à la ville, Anthropos, París, 1968 (versión castellana: El derecho a la ciudad, Península, Barcelona, 1978, págs. 124-125).

6 “La transducción a partir de informaciones relativas a la realidad, así como de una problemática planteada por esa realidad, elabora y construye un objeto teórico, un objeto posible. La transducción supone un feed-back incesante entre el marco conceptual utilizado y las observaciones empíricas. Su teoría (metodología) conforma determinadas operaciones mentales espontáneas del urbanista, del arquitecto, el sociólogo, el político, el filósofo. Introduce el rigor en la invención y el conocimiento de la utopía”. Ibíd., pág. 128.

7 Véase: OMA, “Concours International pour le Parc de La Villette, Paris, Decembre 1982-Mars 1983”, en Goulet, Patrice (ed.), OMA. 6 Projects, Institut Française d’Architecture, París, 1990, págs. 17-179 (versión castellana: “Concurso Internacional para el parque de La Villete, París”, en Ábalos, Iñaki (ed.), Naturaleza y artificio. El ideal pintoresco en la arquitectura y el paisajismo contemporáneos, Editorial Gustavo Gili, Barcelona, 2009, págs. 83-99).

8 Ibíd., pág. 84. El concurso incluso “parecía que se habían reunido todos los elementos de una situación metropolitana ideal, una cultura de la congestión en Europa: un terrain vague entre la ciudad histórica, a su vez violada por las demandas insaciables del siglo XX, y el plancton de la periferia[...]. Lo que sugería La Vilette era, de hecho, la explotación pura de la condición metropolitana: densidad sin arquitectura, una cultura de congestión invisible”.

9 Frumpkin, Howard; Frank, Lawrence y Jackson, Richard, Urban Sprawl and Public Health: Designing, Planning, and Building for Healthy Communities, Island Press, Washington, 2004, pág. xi.

10 Banham, Reyner, Los Angeles: The Architecture of Four Ecologies [1971], University of California Press, Berkeley, 2009.

11 La noción de “informalidad” no se limita a las ciudades del mundo en vías de desarrollo, sino que está también presente en la mayoría de los países industrializados. A menudo se presenta de manera más explícita a causa del impacto de la migración urbana. Los hermanos Jean-Pierre y Luc Dardenne trataron el tema en su película El silencio de Lorna (2008), filmadaen la dura y adusta realidad de la ciudad belga de Lieja.

12 Simone, AbdouMaliq, “The Last Shall Be First: African Urbanities and the Larger Urban World”, en Huyssen, Andreas (ed.), Other Cities, Other Worlds: Urban Imaginaries in a Globalizing Age, Duke University Press, Durham/Londres, 2008, págs. 104-106.

13 Bateson, Gregory, op. cit., pág. 505.

14 Según Giorgio Agamben, esta tesis “arroja una luz siniestra sobre los modelos de los que se sirven las ciencias sociales, la sociología, los estudios urbanos y la arquitectura en su esfuerzo por concebir y organizar al espacio público de las ciudades del mundo sin ninguna claridad respecto al hecho de que su núcleo alberga a la misma vida desnuda (aunque esta se haya transformado y, en apariencia, vuelto más humana) que definió a la biopolítica de los grandes estados totalitarios del siglo XX”. Agamben, Giorgio, Homo sacer: il potere sovrano e la nuda vita, Giulio Einaudi, Turín, 1995(versión castellana:Homo Sacer, Pre-Textos, Valencia, 1998).

15 Mouffe, Chantal, “Agonistic Public Spaces, Democratic Politics, and the Dynamic of Passions”, en Backstein, Joseph; Birnbaum, Daniel y Wallenstein, Sven-Olov (eds.), Thinking Worlds: The Moscow Conference on Philosophy, Politics, and Art, Sternberg Press/Interros Publishing, Berlín/Moscú, 2008, págs. 95-96.

16 Rancière, Jacques, Le Partage du sensible: Esthétique et politique, Fabrique/Diffusion Les Belles Lettres, París, 2000 (versión castellana: La división de lo sensible: estética y política,Centro de Arte de Salamanca, Salamanca, 2002.

17 Mouffe, Chantal, op. cit., pág. 104. En este contexto resulta interesante considerar la obra del artista y diseñador contemporáneo Krzysztof Wodiczko, quien, mediante una serie de instrumentos interactivos y proyecciones urbanas, ha sabido dar voz al “otro”.

18 Zizek, Slavoj, The Indivisible Remainder: An Essay on Schelling and Related Matters, Verso, Londres/Nueva York, 1996, pág. 213.

19 Rancière, Jacques, “Guantanamo, Justice, and Bushspeak: Prisoners of the Infinite”, CounterPunch, Petrolia, 30 de abril de 2002.

20 A diferencia del multiculturalismo, que es un modo de “monoculturalismo plural”, el cosmopolitismo “hace de la inclusión del otro una realidad y/o su máxima”. Véase: Beck, Ulrich, Weltrisikogesellschaft - Auf der Suche nach der verlorenen Sicherheit, Suhrkamp Verlag, Fráncfort, 2007 (versión castellana: La sociedad del riesgo mundial: en busca de la seguridad perdida, Paidós, Barcelona, 2008).

21 Según Jacques Rancière, en su sentido más amplio la estética “refiérese a la distribución de lo sensible que determina el modo de articulación entre formas de actuar, producir, percibir y pensar. Esta definición general extiende a la estética más allá de la esfera estricta del arte para abarcar las coordenadas conceptuales y formas de visibilidad operativas en la esfera política”. Rancière, Jacques, La división de lo sensible, op. cit.

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1 Influenciado en parte por su colaboración con Roberto Rossellini en Roma, ciudad abierta (1945), la película de Federico Fellini muestra la dura realidad de la Roma de posguerra, sus habitantes y sus enredos.

2 The Guardian, Londres, 1 de junio de 2007.

3 Bateson, Gregory, Steps to an Ecology of Mind [1972], University of Chicago Press, Chicago, 2000, pág. 491 (versión castellana: Pasos hacia una ecología de la mente, Carlos Lohlé, Buenos Aires, 1985). Bateson continúa diciendo: “Solíamos pensar en una jerarquía taxonómica –individuo, linaje familiar, subespecie, especie, etc.– como unidades de supervivencia. Ahora vemos una jerarquía de unidades diferente: gen en organismo, organismo en entorno, ecosistema, etc. En su sentido más amplio, la ecología viene a ser el estudio de la interacción y supervivencia de ideas y programas dentro de circuitos (por ejemplo, diferencias, complejos de diferencias, etc.)”.

4 Guattari, Félix, Les Trois écologies, Éditions Galileé, París, 1989 (versión castellana: Las tres ecologías, Pre-Textos, Valencia, 1996, págs. 9-10).

5 Lefebvre, Henri, Le Droit à la ville, Anthropos, París, 1968 (versión castellana: El derecho a la ciudad, Península, Barcelona, 1978, págs. 124-125).

6 “La transducción a partir de informaciones relativas a la realidad, así como de una problemática planteada por esa realidad, elabora y construye un objeto teórico, un objeto posible. La transducción supone un feed-back incesante entre el marco conceptual utilizado y las observaciones empíricas. Su teoría (metodología) conforma determinadas operaciones mentales espontáneas del urbanista, del arquitecto, el sociólogo, el político, el filósofo. Introduce el rigor en la invención y el conocimiento de la utopía”. Ibíd., pág. 128.

7 Véase: OMA, “Concours International pour le Parc de La Villette, Paris, Decembre 1982-Mars 1983”, en Goulet, Patrice (ed.), OMA. 6 Projects, Institut Française d’Architecture, París, 1990, págs. 17-179 (versión castellana: “Concurso Internacional para el parque de La Villete, París”, en Ábalos, Iñaki (ed.), Naturaleza y artificio. El ideal pintoresco en la arquitectura y el paisajismo contemporáneos, Editorial Gustavo Gili, Barcelona, 2009, págs. 83-99).

8 Ibíd., pág. 84. El concurso incluso “parecía que se habían reunido todos los elementos de una situación metropolitana ideal, una cultura de la congestión en Europa: un terrain vague entre la ciudad histórica, a su vez violada por las demandas insaciables del siglo XX, y el plancton de la periferia[...]. Lo que sugería La Vilette era, de hecho, la explotación pura de la condición metropolitana: densidad sin arquitectura, una cultura de congestión invisible”.

9 Frumpkin, Howard; Frank, Lawrence y Jackson, Richard, Urban Sprawl and Public Health: Designing, Planning, and Building for Healthy Communities, Island Press, Washington, 2004, pág. xi.

10 Banham, Reyner, Los Angeles: The Architecture of Four Ecologies [1971], University of California Press, Berkeley, 2009.

11 La noción de “informalidad” no se limita a las ciudades del mundo en vías de desarrollo, sino que está también presente en la mayoría de los países industrializados. A menudo se presenta de manera más explícita a causa del impacto de la migración urbana. Los hermanos Jean-Pierre y Luc Dardenne trataron el tema en su película El silencio de Lorna (2008), filmadaen la dura y adusta realidad de la ciudad belga de Lieja.

12 Simone, AbdouMaliq, “The Last Shall Be First: African Urbanities and the Larger Urban World”, en Huyssen, Andreas (ed.), Other Cities, Other Worlds: Urban Imaginaries in a Globalizing Age, Duke University Press, Durham/Londres, 2008, págs. 104-106.

13 Bateson, Gregory, op. cit., pág. 505.

14 Según Giorgio Agamben, esta tesis “arroja una luz siniestra sobre los modelos de los que se sirven las ciencias sociales, la sociología, los estudios urbanos y la arquitectura en su esfuerzo por concebir y organizar al espacio público de las ciudades del mundo sin ninguna claridad respecto al hecho de que su núcleo alberga a la misma vida desnuda (aunque esta se haya transformado y, en apariencia, vuelto más humana) que definió a la biopolítica de los grandes estados totalitarios del siglo XX”. Agamben, Giorgio, Homo sacer: il potere sovrano e la nuda vita, Giulio Einaudi, Turín, 1995(versión castellana:Homo Sacer, Pre-Textos, Valencia, 1998).

15 Mouffe, Chantal, “Agonistic Public Spaces, Democratic Politics, and the Dynamic of Passions”, en Backstein, Joseph; Birnbaum, Daniel y Wallenstein, Sven-Olov (eds.), Thinking Worlds: The Moscow Conference on Philosophy, Politics, and Art, Sternberg Press/Interros Publishing, Berlín/Moscú, 2008, págs. 95-96.

16 Rancière, Jacques, Le Partage du sensible: Esthétique et politique, Fabrique/Diffusion Les Belles Lettres, París, 2000 (versión castellana: La división de lo sensible: estética y política,Centro de Arte de Salamanca, Salamanca, 2002.

17 Mouffe, Chantal, op. cit., pág. 104. En este contexto resulta interesante considerar la obra del artista y diseñador contemporáneo Krzysztof Wodiczko, quien, mediante una serie de instrumentos interactivos y proyecciones urbanas, ha sabido dar voz al “otro”.

18 Zizek, Slavoj, The Indivisible Remainder: An Essay on Schelling and Related Matters, Verso, Londres/Nueva York, 1996, pág. 213.

19 Rancière, Jacques, “Guantanamo, Justice, and Bushspeak: Prisoners of the Infinite”, CounterPunch, Petrolia, 30 de abril de 2002.

20 A diferencia del multiculturalismo, que es un modo de “monoculturalismo plural”, el cosmopolitismo “hace de la inclusión del otro una realidad y/o su máxima”. Véase: Beck, Ulrich, Weltrisikogesellschaft - Auf der Suche nach der verlorenen Sicherheit, Suhrkamp Verlag, Fráncfort, 2007 (versión castellana: La sociedad del riesgo mundial: en busca de la seguridad perdida, Paidós, Barcelona, 2008).

21 Según Jacques Rancière, en su sentido más amplio la estética “refiérese a la distribución de lo sensible que determina el modo de articulación entre formas de actuar, producir, percibir y pensar. Esta definición general extiende a la estética más allá de la esfera estricta del arte para abarcar las coordenadas conceptuales y formas de visibilidad operativas en la esfera política”. Rancière, Jacques, La división de lo sensible, op. cit.

Preámbulo – La población mundial continúa creciendo, y el resultado es una constante migración desde las zonas rurales a las urbanas. El incremento de la población y del número de ciudades va unido a una mayor explotación de los recursos limitados del planeta. Año tras año, más ciudades se ven afectadas por los efectos devastadores de esta situación. ¿Qué podemos hacer para revertirla? ¿De qué medios disponemos como proyectistas para sortear esta desafiante realidad?

Desde hace décadas, un sinfín de fuentes vienen advirtiéndonos sobre las dificultades a las que nos enfrentamos nosotros y el medio ambiente. El Informe Brundtland de 1987, los estudios científicos sobre el impacto del calentamiento global y las súplicas del exvicepresidente de Estados Unidos, Al Gore, han dejado huella. Sin embargo, la creciente preocupación por el medio ambiente se corresponde también con cierto escepticismo y resistencia. Estados Unidos no solo no ratificó el Protocolo de Kioto, sino que, junto con Canadá y varios países del golfo Pérsico, es uno de los mayores consumidores de recursos energéticos per cápita. Ante su incapacidad de llegar a un acuerdo legalmente vinculante, el fracaso de la Cumbre de Copenhague confirmó la envergadura de los retos que se nos presentan. Puede que el concepto de un “planeta vivo” sea solo un sueño lejano, no solo para quienes más daño hacen al medio ambiente, sino para todo el mundo.

Por supuesto, los arquitectos llevan tiempo siendo conscientes de esta situación, aunque la proporción de quienes están comprometidos con las prácticas sostenibles y ecológicas siga siendo pequeña. Hasta hace poco, buena parte de las obras producidas bajo el estandarte de la arquitectura sostenible era de muy baja calidad. Los primeros ejemplos se centraron principalmente en torno a la capacidad de generar energía con tecnologías rudimentarias y al reciclaje de desperdicios. La arquitectura sostenible, rudimentaria de por sí, a menudo entrañaba un estilo de vida alternativo de renuncia y desprovisto de muchos

¿Por qué urbanismo ecológico?¿Por qué ahora?

Mohsen Mostafavi

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1 Influenciado en parte por su colaboración con Roberto Rossellini en Roma, ciudad abierta (1945), la película de Federico Fellini muestra la dura realidad de la Roma de posguerra, sus habitantes y sus enredos.

2 The Guardian, Londres, 1 de junio de 2007.

3 Bateson, Gregory, Steps to an Ecology of Mind [1972], University of Chicago Press, Chicago, 2000, pág. 491 (versión castellana: Pasos hacia una ecología de la mente, Carlos Lohlé, Buenos Aires, 1985). Bateson continúa diciendo: “Solíamos pensar en una jerarquía taxonómica –individuo, linaje familiar, subespecie, especie, etc.– como unidades de supervivencia. Ahora vemos una jerarquía de unidades diferente: gen en organismo, organismo en entorno, ecosistema, etc. En su sentido más amplio, la ecología viene a ser el estudio de la interacción y supervivencia de ideas y programas dentro de circuitos (por ejemplo, diferencias, complejos de diferencias, etc.)”.

4 Guattari, Félix, Les Trois écologies, Éditions Galileé, París, 1989 (versión castellana: Las tres ecologías, Pre-Textos, Valencia, 1996, págs. 9-10).

5 Lefebvre, Henri, Le Droit à la ville, Anthropos, París, 1968 (versión castellana: El derecho a la ciudad, Península, Barcelona, 1978, págs. 124-125).

6 “La transducción a partir de informaciones relativas a la realidad, así como de una problemática planteada por esa realidad, elabora y construye un objeto teórico, un objeto posible. La transducción supone un feed-back incesante entre el marco conceptual utilizado y las observaciones empíricas. Su teoría (metodología) conforma determinadas operaciones mentales espontáneas del urbanista, del arquitecto, el sociólogo, el político, el filósofo. Introduce el rigor en la invención y el conocimiento de la utopía”. Ibíd., pág. 128.

7 Véase: OMA, “Concours International pour le Parc de La Villette, Paris, Decembre 1982-Mars 1983”, en Goulet, Patrice (ed.), OMA. 6 Projects, Institut Française d’Architecture, París, 1990, págs. 17-179 (versión castellana: “Concurso Internacional para el parque de La Villete, París”, en Ábalos, Iñaki (ed.), Naturaleza y artificio. El ideal pintoresco en la arquitectura y el paisajismo contemporáneos, Editorial Gustavo Gili, Barcelona, 2009, págs. 83-99).

8 Ibíd., pág. 84. El concurso incluso “parecía que se habían reunido todos los elementos de una situación metropolitana ideal, una cultura de la congestión en Europa: un terrain vague entre la ciudad histórica, a su vez violada por las demandas insaciables del siglo XX, y el plancton de la periferia[...]. Lo que sugería La Vilette era, de hecho, la explotación pura de la condición metropolitana: densidad sin arquitectura, una cultura de congestión invisible”.

9 Frumpkin, Howard; Frank, Lawrence y Jackson, Richard, Urban Sprawl and Public Health: Designing, Planning, and Building for Healthy Communities, Island Press, Washington, 2004, pág. xi.

10 Banham, Reyner, Los Angeles: The Architecture of Four Ecologies [1971], University of California Press, Berkeley, 2009.

11 La noción de “informalidad” no se limita a las ciudades del mundo en vías de desarrollo, sino que está también presente en la mayoría de los países industrializados. A menudo se presenta de manera más explícita a causa del impacto de la migración urbana. Los hermanos Jean-Pierre y Luc Dardenne trataron el tema en su película El silencio de Lorna (2008), filmadaen la dura y adusta realidad de la ciudad belga de Lieja.

12 Simone, AbdouMaliq, “The Last Shall Be First: African Urbanities and the Larger Urban World”, en Huyssen, Andreas (ed.), Other Cities, Other Worlds: Urban Imaginaries in a Globalizing Age, Duke University Press, Durham/Londres, 2008, págs. 104-106.

13 Bateson, Gregory, op. cit., pág. 505.

14 Según Giorgio Agamben, esta tesis “arroja una luz siniestra sobre los modelos de los que se sirven las ciencias sociales, la sociología, los estudios urbanos y la arquitectura en su esfuerzo por concebir y organizar al espacio público de las ciudades del mundo sin ninguna claridad respecto al hecho de que su núcleo alberga a la misma vida desnuda (aunque esta se haya transformado y, en apariencia, vuelto más humana) que definió a la biopolítica de los grandes estados totalitarios del siglo XX”. Agamben, Giorgio, Homo sacer: il potere sovrano e la nuda vita, Giulio Einaudi, Turín, 1995(versión castellana:Homo Sacer, Pre-Textos, Valencia, 1998).

15 Mouffe, Chantal, “Agonistic Public Spaces, Democratic Politics, and the Dynamic of Passions”, en Backstein, Joseph; Birnbaum, Daniel y Wallenstein, Sven-Olov (eds.), Thinking Worlds: The Moscow Conference on Philosophy, Politics, and Art, Sternberg Press/Interros Publishing, Berlín/Moscú, 2008, págs. 95-96.

16 Rancière, Jacques, Le Partage du sensible: Esthétique et politique, Fabrique/Diffusion Les Belles Lettres, París, 2000 (versión castellana: La división de lo sensible: estética y política,Centro de Arte de Salamanca, Salamanca, 2002.

17 Mouffe, Chantal, op. cit., pág. 104. En este contexto resulta interesante considerar la obra del artista y diseñador contemporáneo Krzysztof Wodiczko, quien, mediante una serie de instrumentos interactivos y proyecciones urbanas, ha sabido dar voz al “otro”.

18 Zizek, Slavoj, The Indivisible Remainder: An Essay on Schelling and Related Matters, Verso, Londres/Nueva York, 1996, pág. 213.

19 Rancière, Jacques, “Guantanamo, Justice, and Bushspeak: Prisoners of the Infinite”, CounterPunch, Petrolia, 30 de abril de 2002.

20 A diferencia del multiculturalismo, que es un modo de “monoculturalismo plural”, el cosmopolitismo “hace de la inclusión del otro una realidad y/o su máxima”. Véase: Beck, Ulrich, Weltrisikogesellschaft - Auf der Suche nach der verlorenen Sicherheit, Suhrkamp Verlag, Fráncfort, 2007 (versión castellana: La sociedad del riesgo mundial: en busca de la seguridad perdida, Paidós, Barcelona, 2008).

21 Según Jacques Rancière, en su sentido más amplio la estética “refiérese a la distribución de lo sensible que determina el modo de articulación entre formas de actuar, producir, percibir y pensar. Esta definición general extiende a la estética más allá de la esfera estricta del arte para abarcar las coordenadas conceptuales y formas de visibilidad operativas en la esfera política”. Rancière, Jacques, La división de lo sensible, op. cit.

placeres. Todo esto ha cambiado, y sigue cambiando. Las prácticas de diseño sostenible comienzan a filtrarse en las vertientes principales de la profesión. En Estados Unidos, la certificación LEED –el estándar nacional para la evaluación de edificios sostenibles– está aplicándose de forma cada vez más generalizada. Aun así, persiste el problema de que el imperativo moral de la sostenibilidad y, con ello, del diseño sostenible, tiende a suplantar los aportes disciplinares, de modo que no siempre se considera que el diseño sostenible sea excelente o innovador. Esto, a su vez, sigue suscitando escepticismo y siendo causa de tensiones entre quienes promueven el conocimiento disciplinar y quienes abogan por la sostenibilidad, a no ser que seamos capaces de desarrollar nuevos modos de pensar el diseño de manera que este pueda contribuir a ambos campos.

Un segundo tema es el de la escala. Buena parte del trabajo desarrollado por los arquitectos especializados en sostenibilidad ha tenido un alcance relativamente limitado. Por poner un ejemplo, la certificación LEED se ocupa sobre todo del objeto arquitectónico, pero no de la infraestructura de mayor escala que tiene que ver con el territorio de nuestras ciudades. Puesto que los retos de la urbanización acelerada y los recursos globales limitados se han vuelto mucho más urgentes, existe la necesidad de encontrar alternativas de diseño que nos permitan considerar la gran escala de un modo diferente a como hemos venido haciéndolo hasta ahora. Como lugar en el que se producen complejas relaciones –económicas, políticas, sociales y culturales–, lo urbano necesita de un rango igualmente complejo de perspectivas y políticas capaces de responder a las situaciones actuales y sus posibilidades futuras. El objetivo de este libro es proporcionar un marco de referencia que, al unir ecología y urbanismo, pueda ofrecernos el conocimiento, los métodos y las claves de lo que puede ser lo urbano en años venideros.

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1 Influenciado en parte por su colaboración con Roberto Rossellini en Roma, ciudad abierta (1945), la película de Federico Fellini muestra la dura realidad de la Roma de posguerra, sus habitantes y sus enredos.

2 The Guardian, Londres, 1 de junio de 2007.

3 Bateson, Gregory, Steps to an Ecology of Mind [1972], University of Chicago Press, Chicago, 2000, pág. 491 (versión castellana: Pasos hacia una ecología de la mente, Carlos Lohlé, Buenos Aires, 1985). Bateson continúa diciendo: “Solíamos pensar en una jerarquía taxonómica –individuo, linaje familiar, subespecie, especie, etc.– como unidades de supervivencia. Ahora vemos una jerarquía de unidades diferente: gen en organismo, organismo en entorno, ecosistema, etc. En su sentido más amplio, la ecología viene a ser el estudio de la interacción y supervivencia de ideas y programas dentro de circuitos (por ejemplo, diferencias, complejos de diferencias, etc.)”.

4 Guattari, Félix, Les Trois écologies, Éditions Galileé, París, 1989 (versión castellana: Las tres ecologías, Pre-Textos, Valencia, 1996, págs. 9-10).

5 Lefebvre, Henri, Le Droit à la ville, Anthropos, París, 1968 (versión castellana: El derecho a la ciudad, Península, Barcelona, 1978, págs. 124-125).

6 “La transducción a partir de informaciones relativas a la realidad, así como de una problemática planteada por esa realidad, elabora y construye un objeto teórico, un objeto posible. La transducción supone un feed-back incesante entre el marco conceptual utilizado y las observaciones empíricas. Su teoría (metodología) conforma determinadas operaciones mentales espontáneas del urbanista, del arquitecto, el sociólogo, el político, el filósofo. Introduce el rigor en la invención y el conocimiento de la utopía”. Ibíd., pág. 128.

7 Véase: OMA, “Concours International pour le Parc de La Villette, Paris, Decembre 1982-Mars 1983”, en Goulet, Patrice (ed.), OMA. 6 Projects, Institut Française d’Architecture, París, 1990, págs. 17-179 (versión castellana: “Concurso Internacional para el parque de La Villete, París”, en Ábalos, Iñaki (ed.), Naturaleza y artificio. El ideal pintoresco en la arquitectura y el paisajismo contemporáneos, Editorial Gustavo Gili, Barcelona, 2009, págs. 83-99).

8 Ibíd., pág. 84. El concurso incluso “parecía que se habían reunido todos los elementos de una situación metropolitana ideal, una cultura de la congestión en Europa: un terrain vague entre la ciudad histórica, a su vez violada por las demandas insaciables del siglo XX, y el plancton de la periferia[...]. Lo que sugería La Vilette era, de hecho, la explotación pura de la condición metropolitana: densidad sin arquitectura, una cultura de congestión invisible”.

9 Frumpkin, Howard; Frank, Lawrence y Jackson, Richard, Urban Sprawl and Public Health: Designing, Planning, and Building for Healthy Communities, Island Press, Washington, 2004, pág. xi.

10 Banham, Reyner, Los Angeles: The Architecture of Four Ecologies [1971], University of California Press, Berkeley, 2009.

11 La noción de “informalidad” no se limita a las ciudades del mundo en vías de desarrollo, sino que está también presente en la mayoría de los países industrializados. A menudo se presenta de manera más explícita a causa del impacto de la migración urbana. Los hermanos Jean-Pierre y Luc Dardenne trataron el tema en su película El silencio de Lorna (2008), filmadaen la dura y adusta realidad de la ciudad belga de Lieja.

12 Simone, AbdouMaliq, “The Last Shall Be First: African Urbanities and the Larger Urban World”, en Huyssen, Andreas (ed.), Other Cities, Other Worlds: Urban Imaginaries in a Globalizing Age, Duke University Press, Durham/Londres, 2008, págs. 104-106.

13 Bateson, Gregory, op. cit., pág. 505.

14 Según Giorgio Agamben, esta tesis “arroja una luz siniestra sobre los modelos de los que se sirven las ciencias sociales, la sociología, los estudios urbanos y la arquitectura en su esfuerzo por concebir y organizar al espacio público de las ciudades del mundo sin ninguna claridad respecto al hecho de que su núcleo alberga a la misma vida desnuda (aunque esta se haya transformado y, en apariencia, vuelto más humana) que definió a la biopolítica de los grandes estados totalitarios del siglo XX”. Agamben, Giorgio, Homo sacer: il potere sovrano e la nuda vita, Giulio Einaudi, Turín, 1995(versión castellana:Homo Sacer, Pre-Textos, Valencia, 1998).

15 Mouffe, Chantal, “Agonistic Public Spaces, Democratic Politics, and the Dynamic of Passions”, en Backstein, Joseph; Birnbaum, Daniel y Wallenstein, Sven-Olov (eds.), Thinking Worlds: The Moscow Conference on Philosophy, Politics, and Art, Sternberg Press/Interros Publishing, Berlín/Moscú, 2008, págs. 95-96.

16 Rancière, Jacques, Le Partage du sensible: Esthétique et politique, Fabrique/Diffusion Les Belles Lettres, París, 2000 (versión castellana: La división de lo sensible: estética y política,Centro de Arte de Salamanca, Salamanca, 2002.

17 Mouffe, Chantal, op. cit., pág. 104. En este contexto resulta interesante considerar la obra del artista y diseñador contemporáneo Krzysztof Wodiczko, quien, mediante una serie de instrumentos interactivos y proyecciones urbanas, ha sabido dar voz al “otro”.

18 Zizek, Slavoj, The Indivisible Remainder: An Essay on Schelling and Related Matters, Verso, Londres/Nueva York, 1996, pág. 213.

19 Rancière, Jacques, “Guantanamo, Justice, and Bushspeak: Prisoners of the Infinite”, CounterPunch, Petrolia, 30 de abril de 2002.

20 A diferencia del multiculturalismo, que es un modo de “monoculturalismo plural”, el cosmopolitismo “hace de la inclusión del otro una realidad y/o su máxima”. Véase: Beck, Ulrich, Weltrisikogesellschaft - Auf der Suche nach der verlorenen Sicherheit, Suhrkamp Verlag, Fráncfort, 2007 (versión castellana: La sociedad del riesgo mundial: en busca de la seguridad perdida, Paidós, Barcelona, 2008).

21 Según Jacques Rancière, en su sentido más amplio la estética “refiérese a la distribución de lo sensible que determina el modo de articulación entre formas de actuar, producir, percibir y pensar. Esta definición general extiende a la estética más allá de la esfera estricta del arte para abarcar las coordenadas conceptuales y formas de visibilidad operativas en la esfera política”. Rancière, Jacques, La división de lo sensible, op. cit.

14

1 Influenciado en parte por su colaboración con Roberto Rossellini en Roma, ciudad abierta (1945), la película de Federico Fellini muestra la dura realidad de la Roma de posguerra, sus habitantes y sus enredos.

2 The Guardian, Londres, 1 de junio de 2007.

3 Bateson, Gregory, Steps to an Ecology of Mind [1972], University of Chicago Press, Chicago, 2000, pág. 491 (versión castellana: Pasos hacia una ecología de la mente, Carlos Lohlé, Buenos Aires, 1985). Bateson continúa diciendo: “Solíamos pensar en una jerarquía taxonómica –individuo, linaje familiar, subespecie, especie, etc.– como unidades de supervivencia. Ahora vemos una jerarquía de unidades diferente: gen en organismo, organismo en entorno, ecosistema, etc. En su sentido más amplio, la ecología viene a ser el estudio de la interacción y supervivencia de ideas y programas dentro de circuitos (por ejemplo, diferencias, complejos de diferencias, etc.)”.

4 Guattari, Félix, Les Trois écologies, Éditions Galileé, París, 1989 (versión castellana: Las tres ecologías, Pre-Textos, Valencia, 1996, págs. 9-10).

5 Lefebvre, Henri, Le Droit à la ville, Anthropos, París, 1968 (versión castellana: El derecho a la ciudad, Península, Barcelona, 1978, págs. 124-125).

6 “La transducción a partir de informaciones relativas a la realidad, así como de una problemática planteada por esa realidad, elabora y construye un objeto teórico, un objeto posible. La transducción supone un feed-back incesante entre el marco conceptual utilizado y las observaciones empíricas. Su teoría (metodología) conforma determinadas operaciones mentales espontáneas del urbanista, del arquitecto, el sociólogo, el político, el filósofo. Introduce el rigor en la invención y el conocimiento de la utopía”. Ibíd., pág. 128.

7 Véase: OMA, “Concours International pour le Parc de La Villette, Paris, Decembre 1982-Mars 1983”, en Goulet, Patrice (ed.), OMA. 6 Projects, Institut Française d’Architecture, París, 1990, págs. 17-179 (versión castellana: “Concurso Internacional para el parque de La Villete, París”, en Ábalos, Iñaki (ed.), Naturaleza y artificio. El ideal pintoresco en la arquitectura y el paisajismo contemporáneos, Editorial Gustavo Gili, Barcelona, 2009, págs. 83-99).

8 Ibíd., pág. 84. El concurso incluso “parecía que se habían reunido todos los elementos de una situación metropolitana ideal, una cultura de la congestión en Europa: un terrain vague entre la ciudad histórica, a su vez violada por las demandas insaciables del siglo XX, y el plancton de la periferia[...]. Lo que sugería La Vilette era, de hecho, la explotación pura de la condición metropolitana: densidad sin arquitectura, una cultura de congestión invisible”.

9 Frumpkin, Howard; Frank, Lawrence y Jackson, Richard, Urban Sprawl and Public Health: Designing, Planning, and Building for Healthy Communities, Island Press, Washington, 2004, pág. xi.

10 Banham, Reyner, Los Angeles: The Architecture of Four Ecologies [1971], University of California Press, Berkeley, 2009.

11 La noción de “informalidad” no se limita a las ciudades del mundo en vías de desarrollo, sino que está también presente en la mayoría de los países industrializados. A menudo se presenta de manera más explícita a causa del impacto de la migración urbana. Los hermanos Jean-Pierre y Luc Dardenne trataron el tema en su película El silencio de Lorna (2008), filmadaen la dura y adusta realidad de la ciudad belga de Lieja.

12 Simone, AbdouMaliq, “The Last Shall Be First: African Urbanities and the Larger Urban World”, en Huyssen, Andreas (ed.), Other Cities, Other Worlds: Urban Imaginaries in a Globalizing Age, Duke University Press, Durham/Londres, 2008, págs. 104-106.