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Cada cual con su razón es una comedia en tres actos de José Zorrilla. Se articula como muchas obras de este género en torno a equívocos amorosos y situaciones de enredo.-
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Seitenzahl: 74
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José Zorrilla
Comedia en tres actos y en verso
Saga
Cada cual con su razónCover image: Shutterstock Copyright © 1905, 2020 José Zorrilla and SAGA Egmont All rights reserved ISBN: 9788726561531
1. e-book edition, 2020
Format: EPUB 3.0
All rights reserved. No part of this publication may be reproduced, stored in a retrievial system, or transmitted, in any form or by any means without the prior written permission of the publisher, nor, be otherwise circulated in any form of binding or cover other than in which it is published and without a similar condition being imposed on the subsequent purchaser.
SAGA Egmont www.saga-books.com – a part of Egmont, www.egmont.com
Aprobada para su representación por la Junta de Censura de los Teatros del Reino, en 14 de julio de 1849
PERSONAJES ACTORES
EL REY DON FELIPE IV. DON JOSÉ GARCÍA LUNA.
EL MARQUÉS DE VÉLEZ. DON PEDRO LÓPEZ.
DON PEDRO. DON JUAN LOMBÍA.
DOÑA ELVIRA. DOÑA BÁRBARA LAMADRID.
INÉS. DOÑA JERÓNIMA LLORENTE.
EL CONDE DON GUILLÉN. DON N. LUMBRERAS.
UN ALCALDE DE CORTE.
Ronda.
Soldados.
La escena en Madrid. El acto primero en el jardín de DOÑA ELVIRA; el segundo y tercero en la antesala de su habitación. La acción empieza el 21 de septiembre de1..., á las once de la noche, y concluye al día siguiente á la misma hora.
Noche, y jardín de DOÑA ELVIRA. Á un lado un asiento de piedra. En el fondo la casa de DOÑA ELVIRA con rejas y balcones, y más á la derecha una puertecilla que da del jardín á la calle.
DOÑA ELVIRA y DON PEDRO.
DON PEDRO Decidme al menos su nombre.
DOÑA ELVIRA No le debéis conocer.
DON PEDRO Y eso, ¿no es darme á entender que amáis, Elvira, á ese hombre?
DOÑA ELVIRA Ya dije que es un secreto. 5
DON PEDRO Mas si el secreto no sé, ¿cómo de él me fiaré?
DOÑA Por mi palabra sujeto.
ELVIRA Yo os amo, don Pedro, á vos;
mas creedme, y no os asombre, 10
os juro á Dios que de ese hombre
necesitamos los dos.
DON PEDRO No lo comprendo, señora; quién soy yo, dónde he nacido,
quiénes mis padres han sido, 15
estoy ignorando ahora.
Vivo desde que nací
acaso á merced ajena,
sin que pudiera mi pena
llegar á costumbre en mí. 20
Siempre (¡inocente quizás!),
tan negro destino lloro,
mas cuando sé que os adoro
no necesito yo más.
DOÑA Don Pedro, sin freno vais 25
ELVIRA buscando mi perdición.
DON PEDRO Me haréis perder la razón.
DOÑA ELVIRA Nada de ese hombre temáis.
DON PEDRO ¿Que nada tema decís
de un hombre que os enamora, 30
cuando estoy viendo, señora,
que favores le admitís?
DOÑA ¡Hay, don Pedro, tal afán!
ELVIRA Pues ¿yo misma no os lo digo?
Puede ese hombre ser mi amigo; 35
pero nunca mi galán.
DON PEDRO Y ¿cómo creeros puedo si sé que os habla de amor? No dudo de vuestro honor,
mas tengo á su audacia miedo. 40
Cuando os contemplo con él,
Elvira, en conversación,
me rebosa el corazón
en lugar de sangre, hiel.
Vos me lo habéis suplicado 45
ante mí puesta de hinojos,
y aunque es para darme enojos,
con causa os habréis hallado.
Pues tan liviana no os creo
que para mentir mejor 50
hicierais mi propio amor
segundo con tal devaneo.
Obedezco, lloro, y callo
sentencias de vuestra boca,
porque al fin sólo le toca 55
obedecer al vasallo.
Mas en causa tan sagrada,
aun isiendo mi propio hermano,
echara menos la mano
el gavilán de mi espada. 60
DOÑA Por medio, don Pedro, estoy
ELVIRA en tan espinoso asunto,
y os ruego que en él, ni un punto
os olvidéis de quién soy.
DON PEDRO Eso solo me contiene, 65
y si es fuerza que os lo diga,
eso tan sólo me obliga
á respetar al que viene.
Que os juro que de otro modo,
si en mi razón me fiara, 70
en la calle le esperara
atropellando por todo.
DOÑA Bien; pues os vuelvo á advertir
ELVIRA que en paz á ese hombre dejéis,
y no más me preguntéis, 75
que no os puedo más decir.
DON PEDRO No más os preguntaré pues tal es vuestra sentencia, mas si podrá mi paciencia
tener á raya, no sé. 80
DOÑA Cómo la tenéis mirad,
ELVIRA que porque me importa con
mucho, al preveníroslo lucho
mi propia voluntad.
Mandároslo no quisiera, 85
mas á faltarme él ó vos,
don Pedro, de entre los dos
yo no sé á cuál eligiera.
DON PEDRO ¡Loco me habéis de volver!
¡No es, decís, vuestro galán, 90
y evitáis con tanto afán
cuanto le puede ofender!
Que me adoráis me decís,
y á vuestro amor siendo fiel,
comparándome con él, 95
que dudáis me prevenís.
Decidme si podéis, pues,
¿es vuestro padre, señora?
DOÑA ELVIRA No, por cierto.
DON PEDRO ¿Es en mal hora hermano?
DOÑA No.
ELVIRA
DON PEDRO Pues ¿quién es? 100
¿Debéisle tantos favores,
vida, hacienda, honor quizás?...
DOÑA No le debo á ese hombre más
ELVIRA que penas y sinsabores.
DON PEDRO ¿Y le amáis?
DOÑA ELVIRA No, le respeto. 105
DON PEDRO ¿Y el respeto solamente puede en vos...
DOÑA Andad prudente,
ELVIRA que tocáis en mi secreto.
DON PEDRO ¡Oh! Por cuanto sois y amáis,
fiad el secreto en mí, 110
que al depositarlo aquí,
en un pozo lo enterráis.
DOÑA ELVIRA Díjeos, don Pedro, que no.
DON PEDRO ¡Morir de celos me haréis!
DOÑA De celos no os acordéis 115
ELVIRA mientras os los guarde yo.
DON PEDRO Mas ved que es duro castigo para un amante, señora, ser, por secretos que ignora,
de ajenas dichas testigo. 120
Pensad lo cruel del tormento
de esperar puesto en un potro,
sabiendo que tiene otro
entrada en vuestro aposento.
DOÑA ¿En mi aposento? Eso no; 125
ELVIRA reparad que jardín es.
DON PEDRO Para estar á vuestros pies por igual lo tengo yo. Y aun es peor, en verdad,
que un techo de roble ó piedra, 130
un banco de verde hiedra
y un techo de obscuridad.
DOÑA Callad ya, que me ofendéis;
ELVIRA pues ¿con sospecha tan ruin
á solas en mi jardín, 135
que estáis conmigo no veis?
Y si soy quien soy con vos,
con quien á casarme voy,
¿dejaré de ser quien soy
con quien odiamos los dos? 140
Don Pedro, pensadlo bien,
y no así, de celos loco,
tengáis á una dama en poco
sin razón y sin por quién.
DON PEDRO ¿Sin por quién? Pues ¿y ese hombre 145
a quien vais á recibir?
DOÑA Necio andáis en insistir,
ELVIRA que nunca os dirá su nombre. Y escuchadme en conclusión,
don Pedro, porque á fe mía 150
que es ya larga esta porfía
tenga ó no tenga razón.
Yo os amo. ¿Qué más queréis?
No hubo jamás hombre alguno
que no me fuera importuno 155
desque vos me conocéis.
Si cansado de mi amor
me dejarais inconstante,
no fuera un claustro bastante
para enterrar mi dolor. 160
Por ello en el alma herida,
olvidando al mismo cielo,
osara en mi desconsuelo
atentar contra mi vida.
Mas es, don Pedro, preciso 165
que á ese hombre reciba aquí,
y ha de ser, don Pedro, así
aunque importe el Paraíso.
Mirad si causa tendré
cuando así ante vos me humillo. 170
DON PEDRO Asombrado estoy de oillo, y aun no lo comprendo, á fe. ¿Que murierais me decís si yo os dejara de amar;
eso debéis esperar, 175
y sin embargo, insistís?
DOÑA Eso esperar no debía;
ELVIRA mas ya que desde hoy lo espero, espero en Dios, caballero,
que os arrepintáis un día. 180
DON PEDRO ¡Mas lloráis!... Decidme al fin el secreto, y concluyamos.
DOÑA Mirad, don Pedro, que estamos
ELVIRA á solas en el jardín.
DON PEDRO ¡Oh, tanto dudar me ofende! 185
¿No puedo ayudaros yo
en ese secreto?
DOÑA No,
ELVIRA que si se aclara se vende.
DON PEDRO ¡Señora!
DOÑA Que desconfío
ELVIRA de vos nunca imaginéis; 190
quien le venda no seréis,
seré yo, porque no es mío.
DON PEDRO Una palabra no más, y perdonádmela, Elvira:
¿desconfianza os inspira 195
mi nacimiento quizás?
DOÑA Don Pedro, yo en vos no amé
ELVIRA la cuna en que habéis nacido; hidalgo os he conocido,
siempre hidalgo os amaré. 200
Cuando en mi antigua aflicción
me hallasteis, de amor ajena,
vos consolabais mi pena
sin preguntar la razón.
Nada vos sabéis de mí, 205
ni de vos nada sé yo;
puesto que no nos pesó,
sigamos, don Pedro, así
y retiraos.
DON PEDRO Adiós,
señora, y ved lo que hacéis. 210
DOÑA ELVIRA Lo que he resuelto sabéis.
DON PEDRO Dios os guarde.
DOÑA Va con vos.
ELVIRA Inés, á don Pedro guía y cierra luego el portal.
(Secreto triste y fatal 215
que me pone en la agonía.)