Cantar de Mio Cid - Anónimo - E-Book

Cantar de Mio Cid E-Book

Anónimo

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Beschreibung

Al cabo de ocho siglos, el Cantar de Mio Cid sigue siendo uno de los poemas épicos más notables, y el único que sobrevivió de la España medieval. En él se narran las gestas legendarias del caballero Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid Campeador, en un relato donde la ficción y los acontecimientos históricos se mezclan de un modo único. Las vicisitudes de la vida del Cid - los dos destierros, - las campañas victoriosas de Valencia - y la coronación de sus hijas como reinas de Aragón y Navarra,son hechos clave en la historia del Cid y ocasiones para descubrir su personalidad. Desde el siglo XIII el Cantar de Mio Cid les ofrece a los lectores una representación vívida y conmovedora de algunas de las inquietudes y las pasiones humanas más universales, como la justicia, la lealtad, la traición, el honor o los celos. De este libro existe un solo ejemplar del texto original que se conserva en la Biblioteca Nacional en Madrid. En el siglo XVI estuvo en el Archivo del Concejo de Vivar. Después estuvo en un convento del mismo pueblo. Ruiz de Ulibarri hizo una copia en 1596. Luego, Eugenio Llaguno y Amírola, secretario del Consejo de Estado, lo sacó de allí en 1779 para que lo publicase Tomás Antonio Sánchez. Terminada la edición, Llaguno lo tuvo en su poder y lo pasó a sus herederos. En el siglo XIX estuvo en poder de Pascual de Gayangos y hacia 1858 lo consultó Damas-Hinard. En esa época estuvo en Boston a petición de Ticknor. En 1863 lo tuvo el primer marqués de Pidal y por entonces lo estudió Florencio Janer. Más tarde lo heredó Alejandro Pidal y en su casa lo estudiaron Vollmöller, Baist, Huntington y Ramón Menéndez Pidal. Finalmente paso a la Biblioteca Nacional de Madrid en 1960. Se trata de un tomo de 74 hojas de pergamino grueso, le faltan tres, una al inicio y dos entre las hojas 47, 48 y 69, 70. En muchas páginas hay manchas provocadas por los reactivos utilizados desde el siglo XVI para leer los pasajes ininteligibles. Aunque estos pasajes no son demasiados. La encuadernación es del siglo XV. Las hojas están ordenadas en once cuadernos. Todo el manuscrito original es un texto continuo sin separación en cantares, ni espacios entre los versos, que siempre empiezan con letras mayúsculas. La presente edición conserva el texto original del libro, sin actualizaciones ortográficas.

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Anónimo

Cantar de mio Cid Texto antiguo

Barcelona 2024

Linkgua-ediciones.com

Créditos

Título original: Cantar de mio Cid.

© 2024, Red ediciones S.L.

e-mail: [email protected]

Diseño de cubierta: Michel Mallard.

ISBN rústica ilustrada: 978-84-9007-714-6.

ISBN tapa dura: 978-84-9007-194-6.

ISBN ebook: 978-84-9897-136-1.

Cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública o transformación de esta obra solo puede ser realizada con la autorización de sus titulares, salvo excepción prevista por la ley. Diríjase a CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos, www.cedro.org) si necesita fotocopiar, escanear o hacer copias digitales de algún fragmento de esta obra.

Sumario

Créditos 4

Brevísima presentación 7

Cantar de mio Cid 9

Cantar primero 11

Cantar segundo 51

Cantar tercero 93

Libros a la carta 145

Brevísima presentación

El poema del Mio Cid fue escrito en la España del siglo XII, por un juglar de San Esteban de Gormaz. El poema, dividido en tres partes o cantares, narra el injusto destierro y las aventuras del Cid, Rodrígo Díaz de Vivar. El deshonor y la recuperación de la honra, constituyen su eje central, que describe la mentalidad y los valores éticos de su tiempo.

Existe un solo ejemplar del texto original que se conserva en la Biblioteca Nacional en Madrid. En el siglo XVI se guardaba en el Archivo del Concejo de Vivar. Después estuvo en un convento del mismo pueblo. Y Ruiz de Ulibarri hizo una copia en 1596. Eugenio Llaguno y Amírola, secretario del Consejo de Estado, lo sacó de allí en 1779 para que lo publicase Tomás Antonio Sánchez. Terminada la edición, Llaguno lo tuvo en su poder y lo pasó a sus herederos. En el siglo XIX estuvo en poder de Pascual de Gayangos y hacia 1858 fue consultado por Damas-Hinard. En esa época fue enviado a Boston para que lo consultase Ticknor. En 1863 lo tuvo el primer marqués de Pidal y por entonces lo estudió Florencio Janer.

Antes de pasar a la Biblioteca Nacional de Madrid (fue adquirido el 20 de diciembre de 1960) lo heredó Alejandro Pidal y en su casa lo estudiaron Vollmöller, Baist, Huntington y Ramón Menéndez Pidal.

Se trata de un tomo de 74 hojas de pergamino grueso, le faltan tres, una al inicio y dos entre las hojas 47, 48 y 69, 70. En muchas páginas hay manchas provocadas por los reactivos utilizados desde el siglo XVI para leer los pasajes ininteligibles. Aunque estos pasajes no son demasiados.

La encuadernación es del siglo XV. Las hojas están ordenadas en once cuadernos.

Todo el manuscrito original es un texto continuo sin separación en cantares, ni espacios entre los versos, que siempre empiezan con letras mayúsculas.

Cantar de mio Cid

Cantar primero

De los sos oios tan fuerte mientre lorando

Tornaua la cabeça e estaua los catando:

Vio puertas abiertas e vços sin cannados,

Alcandaras uazias sin pielles e sin mantos,

E sin falcones e sin adtores mudados.

Sospiro Myo Çid ca mucho auie grandes cuydados.

Ffablo Myo Çid bien e tan mesurado:

Grado a ti Sennor Padre que estas en alto,

Esto me an buelto myos enemigos malos.

Alli pienssan de aguiiar, alli sueltan las riendas:

A la exida de Biuar ouieron la corneia diestra,

E entrando a Burgos ouieron la siniestra.

Meçio Myo Çid los ombros e engrameo la tiesta:

Albricia Albar Ffanez ca echados somos de tierra.

Myo Çid Ruy Diaz por Burgos entraua.

En su conpanna LX pendones leuaua: exien lo ver mugieres e uarones.

Burgeses e burgesas por las finiestras son puestos.

Plorando de los oios, tanto auyen el dolor.

De las sus bocas todos dizian una razon:

Dios, que buen vassalo si ouiesse buen sennor!

Conbidar le yen de grado, mas ninguno non osaua,

El rey don Alfonsso tanto auie la grand sanna.

Antes de la noche en Burgos del entro su carta,

Con grand recabdo e fuerte mientre sellada:

Que a Myo Çid Ruy Diaz que nadi nol diessen posada,

E aquel que gela diesse sopiesse una palabra,

Que perderie los aueres e mas los oios de la cara,

E aun demas los cuerpos e las almas.

Grande duelo auien las yentes christianas.

Asconden se de Myo Çid ca nol osan dezir nada

El Campeador adelino a su posada.

Asi commo lego a la puerta falola bien çerrada,

Por miedo del rey Alfonsso que assi lo auie parado:

Que si non la quebrantas por fuerça que non gela abriese nadi.

Los de Myo Çid a altas uoçes laman:

Los de dentro non les querien tornar palabra.

Aguiio Myo Çid, a la puerta se legaua,

Saco el pie del estribera, una feridal daua.

Non se abre la puerta, ca bien era çerrada.

Vna ninna de nuef annos a oio se paraua:

Ya Campeador en buen ora çinxiestes espada.

El rey lo ha uedado, anoch del entro su carta,

Con grant recabdo e fuerte mientre sellada.

Non uos osariemos abrir nin coger por nada;

Si non perderiemos los aueres e las casas,

E demas los oios de las caras.

Çid, en el nuestro mal uos non ganades nada,

Mas el Criador uos uala con todas sus uertudes sanctas.

Esto la ninna dixo, e tornos pora su casa.

Ya lo vee el Çid que del rey non auie graçia.

Partios de la puerta, por Burgos aguijaua,

Lego a Sancta Maria: luego descaualga.

Ffinco los ynoios, de coraçon rogaua.

La oraçion fecha luego caualgaua.

Salio por la puerta e en Arlançon posaua.

Cabo essa villa en la glera posaua,

Ffincaua la tienda e luego descaualgaua.

Myo Çid Ruy Diaz, el que en buen ora çinxo espada,

Poso en la glera quando nol coge nadi en casa.

Derredor del vna buenna conpanna.

Assi poso Myo Çid commo si fuesse en montanna.

Vedada lan conprar dentro en Burgos la casa.

De toda cosas quantas son de uianda

Non le osarien uender al menos dinarada.

Martin Antolinez, el burgales conplido,

A Myo Çid e a los suyos abastales de pan e de uino.

Non lo compra ca el se lo auie consigo.

De todo conducho bien los ouo bastidos.

Pagos Myo Çid el Campeador e todos los otros que uan a so en çeruiçio.

Ffablo Martin Antolinez, odredes lo que a dicho:

Ya Canpeador en buen ora fuestes nacido.

Esta noch ygamos e uaymos nos al matino,

Ca acusado sere de lo que uos he seruido.

En yra del rey Alffonsso yo sere metido.

Si con uusco escapo sano o biuo

Aun çerca o tarde el rey querer me ha por amigo;

Si non quanto dexo no lo preçio un figo.

Ffablo Myo Çid, el que en buen ora çinxo espada:

Martin Antolinez, sodes ardida lança:

Si yo biuo doblar uos he la soldada.

Espeso e el oro e toda la plata

Vien lo vedes que yo no trayo auer, huebos me serie

Para toda mi companna.

Ffer lo he amidos, de grado no aurie nada.

Con uuestro consego bastir quiero dos archas.

Yncamos las darena, ca bien seran pesadas,

Cubiertas de guadalmeçi e bien enclaueadas:

Los guadameçis uermeios e los clauos bien dorados.

Por Rachel e Vidas uayades me priuado.

Entrando en Burgos me vedaron conprar, e el rey me a ayrado

Non puedo traer el auer, ca mucho es pesado:

Enpennar gelo he por lo que fuere guisado.

De noche lo lieuen que non lo vean christianos:

Vealo el Criador con todos los sos sanctos.

Yo mas non puedo e amydos lo fago.

Martin Antolinez non lo detarua,

Por Rachel e Vidas apriessa demandaua.

Passo por Burgos, al castiello entraua,

Por Rachel e Vidas apriessa demandaua.

Rachel e Vidas en vno estauan amos,

En cuenta de sus aueres, de los que auien ganados.

Lego Martin Antolinez a guisa de menbrado.

O sodes, Rachel e Vidas, los myos amigos caros?

En poridad flablar querria con amos.

Non lo detardan, todos tres se apartaron:

Rachel e Vidas amos me dat las manos

Que non me descubrades a moros nin a christianos;

Por siempre uos fare ricos que non seades menguados.

El Campeador por las parias fue entrado;

Grandes aueres priso e mucho sobeianos:

Retouo dellos quanto que fue algo.

Por en vino a aquesto por que fue acusado.

Tiene dos arcas lennas de oro esmerado.

Ya lo vedes que el rey le a ayrado.

Dexado ha heredades e casas e palaçios.

Aquelas non las puede leuar si non seryen ventadas.

El Campeador dexar las ha en uuestra mano,

E prestalde de auer lo que sea guisado.

Prended las archas e meted las en uuestro saluo:

Con grand iura meted y las fes amos

Que non las catedes en todo aqueste anno.

Rachel e Vidas seyen se conseiando:

Nos huebos auemos en todo de ganar algo

Bien lo sabemos que el algo ganno.

Quando a tierra de moros entro, que grant auer saco!

Non duerme sin sospecha qui auer tiene monedado.

Estas archas prendamos las amas,

En logar las metamos que non sean ventadas.

Mas dezid nos del Çid, de que sera pagado,

O que ganançia nos dara por todo aqueste anno?

Respuso Martin Antolinez a guisa de menbrado:

Myo Çid querra lo que ssea aguisado:

Perdir uos a poco por dexar so auer en saluo.

Acogen sele omnes de todas partes menguados.

A menester seys çientos marcos.

Dixo Rachel e Vidas: dar gelos de grado.

Ya vedes que entra la noch, el Çid es presurado,

Huebos auemos que nos dedes los marchos.

Dixo Rachel e Vidas: non se faze assi el mercado,

Si non primero prendiendo e despues dando.

Dixo Martin Antolinez: yo desso me pago

Amos todos tred al Campeador contado,

E nos uos aiudaremos, que assi es aguisado

Por aduzir las archas e meter las en uuestro saluo,

Que non lo sepan moros nin christianos.

Dixo Rachel e Vidas: nos desto nos pagamos.

Las archas aduchas, prendet seyes çientos marcos.

Martin Antolinez caualgo priuado

Con Rachel e Vidas, de voluntad e de grado,

Non viene a la pueent ca por el agua a passado,

Que gelo non ventanssen de Burgos omne nado.

Afeuos los a la tienda del Campeador contado.

Assi commo entraron al Çid besaron le las manos.

Sonrrisos Myo Çid, estaualos fablando:

Ya don Rachel e Vidas auedes me olbidado,

Ya me exco de tierra ca del rey so ayrado.

A lo quem semeia de lo mio auredes algo,

Mientra que vivades non seredes menguados.

Don Rachel e Vidas a Myo Çid besaron le las manos.

Martin Antolinez el pleyto a parado,

Que sobre aquelas archas dar le yen VI çientos marcos,

E bien gelas guardarien fasta cabo del anno;

Ca assil dieran la fe e gelo auien iurado:

Que si antes las catassen que fuessen periurados,

Non les diesse Myo Çid de la ganançia un dinero malo.

Dixo Martin Antolinez: cargen las archas priuado:

Leualdas, Rachel e Vidas, poned las en uuestro saluo;

Yo yre connuso que adugamos los marcos

Ca a mouer a Myo Çid ante que cante el gallo.

Al cargar de las archas veriedes gozo tanto!

Non las podien poner en somo mager eran esforçados.

Gradan se Rachel e Vidas con aueres monedados,

Ca mientra que visquiessen refechos eran amos.

Rachel a Myo Çid la manol va besar:

Ya, Canpeador, en buen ora çinxiestes espada.

De Castiella uos ydes pora las yentes estrannas.

Assi es uuestra uentura, grandes son uuestras ganançias.

Vna piel vermeia morisca e ondrada

Çid, beso uuestra mano, en don que la yo aya.

Plazme, dixo el Çid, da qui sea mandada;

Si uos la aduxier dalla, si non contalda sobre las arcas.

En medio del palaçio tendieron vn almofalla,

Sobrella vna sauana de rançal e muy blanca.

A tod el primer colpe III.CCC marcos de plata echaron.

Yontolos don Martino, sin peso los tomaua.

Los otros CCC en oro gelos pagaua.

Çinco escuderos tiene don Martino, a todos los cargaua.

Quando esto ouo fecho, odredes lo que fablaua:

Ya, don Rachel e Vidas, en uuestras manos son las arcas

Yo que esto uos gane, bien mereçia calças.

Entre Rachel e Vidas aparte yxieron amos:

Demos le buen don ca el nos lo ha buscado.

Martin Antolinez un burgales contado,

Vos lo mereçedes, daruos queremos buen dado

De que fagades calças e rica piel e buen manto.

Damos uos en don a uos XXX marchos.

Mereçer nos los hedes ca esto es aguisado;

Atorgar nos hedes esto que auemos parado.

Gradeçiolo don Martino e reçibio los marchos.

Grado exir de la posada e espidios de amos.

Exido es de Burgos e Arlançon a passado:

Vino pora la tienda del que en buen ora nasco.

Reçibiolo el Çid abiertos amos los braços;

Venides, Martin Antolinez, el mio fiel vassalo;

Aun vea el dia que de mi ayades algo.

Vengo, Campeador, con todo buen recabdo:

Vos VI çientos e yo XXX he ganados.

Mandad coger la tienda e vayamos priuado:

En San Pero de Cardena y nos cante el gallo.

Veremos vuestra mugier menbrada fija dalgo,

Mesuraremos la posada e quitaremos el reynado.

Mucho es huebos ca çerca viene el plazo.

Estas palabras dichas, la tienda es cogida.

Myo Çid e sus conpannas caualgan tan ayna.

La cara del cauallo torno a Sancta Maria,

Alzo su mano diestra, la cara se sanctigua:

A ti lo gradesco, Dios que çielo e tierra guias;

Valan me tus vertudes, gloriosa sancta Maria.

Daqui quito Castiella pues que el rey he en yra:

Non se si entrare y mas en todos los myos dias.

Vuestra uertud me uala, Gloriosa, en my exida e me aiude;

Ella me acorra de noch e de dia.

Si uos, assi lo fizieredes e la uentura me fuere conplida,

Mando al uuestro altar buenas donas e ricas.

Esto e yo en debdo: que faga y cantar mill missas.

Spidios el caboso de cuer e de veluntad.

Sueltan las riendas e pienssan de aguijar.

Dixo Martin Antolinez: vere a la mugier a todo myo solaz.

Castigar los he commo abran a far.

Si el rey me lo quisiere tomar a mi non minchal:

Antes sere con uusco que el Sol quiera rayar.

Tornauas Martin Antolinez a Burgos, e Myo Çid a aguijar

Pora San Pero de Cardena quanto pudo a espolear,

Con estos caualleros quel siruen a so sabor.

Apriessa cantan los gallos e quieren quebrar albores.

Quando lego a San Pero el buen Campeador

El abbat don Sancho, christiano del Criador,

Rezaua los matines a buelta de los albores.

Y estaua donna Ximena con çinco duennas de pro,

Rogando a san Pero e al Criador:

Tu que a todos guias, val a Myo Çid el Campeador.

Lamauan a la puerta y sopieron el mandado.

Dios que alegre fue el abbat don Sancho!

Con lunbres e con candelas al corral dieron salto:

Con tan grant gozo reçiben al que en buen ora nasco!

Gradesco lo a Dios, Myo Çid, dixo el abbat don Sancho;

Pues que aqui uos veo, prendet de mi ospedado.

Dixo el Çid: graçias, don abbat, e so uuestro pagado:

Yo adobare conducho pora mi e pora mis vassallos;

Mas porque me vo de tierra, douos L marchos;

Si yo algun dia visquier, seruos han doblados:

Non quiero fazer en el monesterio vn dinero de danno.

Euades aqui pora donna Ximena douos C marchos.

A ella e a sus fijas e a sus duennas siruades las est anno.

Dues fijas dexo ninnas e prendet las en los braços.

Aquellas uos acomiendo a uos, abbat don Sancho.

Dellas e de mi mugier fagades todo recabdo.

Si essa despenssa uos falleçiere o uos menguare algo

Bien las abastad, yo assi uos lo mando.

Por vn marcho que despendades al monesterio darle he yo quatro.

Otorgado gelo auie el abbat de grado.

Afeuos donna Ximena con sus fijas do ua legando.

Sennas duennas las traen e aduzen las adelant.

Antel Campeador donna Ximena finco los ynoios amos.

Loraua de los oios, quisol besar las manos.

Merçed Canpeador, en ora buena fuestes nado.

Por malos mestureros de tierra sodes echado.

Merçed ya, Çid, barba tan conplida.

Ffem ante uos yo e uuestras ffijas: ynffantes son e de dias [chicas]

Con aquestas mys duennas de quien so yo seruida:

Yo lo veo que estades uos en yda,

E nos de uos partir nos hemos en vida.

Dand nos conseio por amor de sancta Maria.

Enclino las manos en la su barba velida,

A las sus fijas en braços las prendia:

Legolas al coraçon, ca mucho las queria.

Lora de los oios, tan fuerte mientre sospira:

Ya, donna Ximena, la mi mugier tan conplida,

Commo a la mi alma yo tanto uos queria:

Ya lo vedes que partir nos tenemos en vida

Yo yre e uos fincaredes remanida.

Plega a Dios e a sancta Maria, que aun con mis manos case estas mis fijas.

O quede ventura e algunos dias vida!

E uos mugier ondrada, de my seades seruida.

Grand iantar le fazen al buen Canpeador.

Tannen las campanas en San Pero a clamor.

Por Castiella oyendo uan los pregones,

Commo se ua de tierra Myo Çid el Canpeador.

Vnos dexan casas e otros onnores.

En aques dia en la puent de Arlançon

Çiento e quinze caualleros todos iuntados son.

Todos demandan por Myo Çid el Canpeador.

Martin Antolinez con ellos conio

Vansse pora San Pero do esta el que en buen punto naçio.

Quando lo sopo Myo Çid el de Biuar,

Cal creçe conpanna porque mas valdra,

Apriessa caualga, reçebir los salie.

Tornos a sonrisar, legan le todos, la manol ban besar.

Ffablo Myo Çid de toda voluntad:

Yo ruego a Dios e al Padre Spirital,

Vos que por mi dexades casas e heredades,

En antes que yo muera algun bien uos pueda far,

Lo que perdedes doblado uos lo cobrar.

Plogo a Myo Çid porque creçio en la iantar.

Plogo a los otros omnes todos quantos con el estan.

Los VI dias de plazo passados los an:

Tres an por troçir, sepades que non mas.

Mando el rey a Myo Çid a aguardar,

Que si despues del plazo en su tierral pudies tomar,

Por oro nin por plata non podrie escapar.

El dia es exido e la noch querie entrar.

A sos caualleros mandolos todos iuntar:

Oyd varones, non uos caya en pesar;

Poco auer trayo, dar uos quiero uuestra part.

Sed menbrados commo lo deuedes far:

A la mannana quando los gallos cantaran

Non uos tardedes, mandedes ensellar.

En San Pero a matines tandra el buen abbat.

La missa nos dira, esta sera de sancta Trinidad.

La missa dicha penssemos de caualgar,

Ca el plazo viene açerca, mucho auemos de andar.

Cuemo lo mando Myo Çid, assi lo an todos ha far.

Passando ua la noch, viniendo la manna[na].

Ellos mediados gallos pienssan de caualgar.

Tannen a matines a vna priessa tan grand.

Myo Çid e su mugier a la eglesia uan.

Echos donna Ximena en los grados delantel altar,

Rogando al Criador quanto ella meior sabe,

Que a Mio Çid el Campeador que Dios le curias de mal:

Ya, Sennor Glorioso, Padre que en çielo estas,

Ffezist çielo e tierra, el terçero el mar;

Ffezist estrelas e Luna e el Sol pora escalentar;

Prisist encarnaçion en sancta madre;

En Belleem apareçist, commo fue tu voluntad.

Pastores te glorifficaron, ouieron de alaudare.

Tres reyes de Arabia te vinieron adorar:

Melchor e Gaspar e Baltasar oro e tus e mirra

Te offreçieron, commo fue tu voluntad.

A Jonas quando cayo en la mar;

Saluest a Daniel con los leones en la mala carçel;

Saluest dentro en Roma al sennor san Sabastian;

Saluest a sancta Susanna del falso criminal.

Por tierra andidiste XXXII annos, Sennor Spirital,

Mostrando los miraclos, por en auemos que fablar.

Del agua fezist vino e de la piedra pan;

Resuçitest a Lazaro, ca fue tu voluntad.

A los iudios te dexeste prender do dizen monte Caluari.