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No puede saber que está bajo mi protección…
Antes me habían contratado como guardaespaldas en Eagle Tactical para celebridades, músicos e incluso billonarios. Ninguno de ellos evadió mi protección.
La zorrita que entró a mi vida como un huracán terminó siendo mi responsabilidad.
Había sido contratado para protegerla… pero en secreto.
El contrato con el estudio es muy claro. No tengo permitido revelarle que soy su guardaespaldas personal cuando se va del set de filmación.
Ella sabrá la verdad y en cuanto lo haga, me odiará.
Oculto: Lincoln es el tercer libro de la serie “Eagle Tactical” y nos presenta a un héroe que ya conoces y amas de la serie. También incluye la historia de Ariella y Jaxson, que se acerca a su final feliz.
Recomiendo encarecidamente que leas los libros de la serie en orden.
Publicado originalmente como Ocultar: Lincoln. Esta segunda edición es una nueva traducción.
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Oculto: Lincoln
Táctica Águila Libro 3
Willow Fox
Publicado por Slow Burn Publishing
© 2022
Traducido por danni1993
Corregido por tamazarewsky
v2
Portada de Slow Burn Publishing
Imagen(es) utilizada(s) bajo licencia de Shutterstock.com.
Todos los derechos reservados.
Ninguna parte de este libro puede ser reproducida o transmitida en cualquier forma o por cualquier medio, electrónico o mecánico, incluyendo fotocopias, grabaciones, o por cualquier sistema de almacenamiento y recuperación de información, sin el permiso por escrito del editor.
Acerca del Libro
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 33
Epílogo
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Acerca de la autora
Libros de Willow Fox
Oculto: Lincoln
Táctica Águila Libro 3
No puede saber que está bajo mi protección…
Antes me habían contratado como guardaespaldas en Eagle Tactical para celebridades, músicos e incluso billonarios. Ninguno de ellos evadió mi protección.
La zorrita que entró a mi vida como un huracán terminó siendo mi responsabilidad.
Había sido contratado para protegerla… pero en secreto.
El contrato con el estudio es muy claro. No tengo permitido revelarle que soy su guardaespaldas personal cuando se va del set de filmación.
Ella sabrá la verdad y en cuanto lo haga, me odiará.
Oculto: Lincoln es el tercer libro de la serie “Eagle Tactical” y nos presenta a un héroe que ya conoces y amas de la serie. También incluye la historia de Ariella y Jaxson, que se acerca a su final feliz.
Recomiendo encarecidamente que leas los libros de la serie en orden.
Lincoln
El cansancio no alcanzaba a describir la fatiga en mis ojos.
Entré a la cafetería. La campana de la puerta tintineó mientras entraba y el aroma de los granos de café me dio el primer chute de la mañana como si fuera una droga.
Necesitaba más…
⸺¡Siguiente! ⸺espetó la chica detrás del mostrador.
Ya que aún no había tomado mi primer café de la mañana, no tenía esa sacudida para despertarme. Me moví hacia el mostrador.
⸺Hola, Skylar.
¿Desde cuando ella trabajaba aquí? Lo último que había escuchado es que había venido al pueblo a visitar a su hermano.
Al parecer, no se iba a ir pronto.
⸺¿Qué puedo servirte? ⸺Preguntó ella.
Ella estaba detrás del mostrador usando un delantal marrón y una gorra a juego. Aunque me sentía fatigado, sus ojos se suavizaron y sus labios se curvaron en una sonrisa cuando pareció reconocerme.
⸺Hola, Lincoln, ¿cierto?
⸺Si ⸺dije mientras miraba a la pizarra que tenía detrás y que contenía la lista de las bebidas disponibles y los especiales.
Al dueño le gustaba cambiar el menú y nunca podías encontrar un simple café negro en este.
⸺¿Qué recomiendas?
Tomar una decisión a esta hora parecía mucho esfuerzo.
⸺Que hagas tu café en casa ⸺dijo Skylar⸺. El café aquí es excesivamente caro, pero no le digas a mi jefe o seré despedida.
Resoplé en voz baja.
⸺Entendido. Tendré lo que sea que prepares, pero que sea bien cargado y sin añadirle nada.
No podía soportar el azúcar a esta hora de la mañana.
El sol aún no había salido y debería estar en la cama ya que aun me quedaba otra hora hasta la que usualmente me despierto. No había sido capaz de dormir y mi cafetera había sido destruida gracias al reciente tiroteo en el restaurante. El sueño me había eludido, incluso en un domingo en la mañana cuando debería ser capaz de relajarme y tomarme el día libre. No era usual que el estrés me molestara, pero estaba en constante alerta y listo para saltar a la acción luego de que dos mafiosos habían acribillado a balas el restaurante. Una consecuencia de mi tiempo en el ejército que me forzaba a estar despierto al instante.
Skylar pulsó algunas teclas en la caja registradora antes de que metiera mi tarjeta de crédito en el lector de tarjetas para pagar.
Una rubia se acercó. Usaba lentes de sol gigantes, de la clase que una mujer usaba ya sea para ocultar un ojo morado o para ocultar su identidad. Ambas opciones parecían plausibles.
⸺Disculpa ⸺dijo ella⸺. Pedí un café hace diez minutos.
⸺Han pasado cinco minutos ⸺dijo Skylar⸺, y tu bebida está sobre el mostrador, esperando que la recojas.
⸺No dijiste mi nombre ⸺dijo la mujer de los lentes de sol.
⸺Heather.
⸺Es Harper ⸺dijo ella, corrigiendo a Skylar.
Skylar caminó hasta donde estaba la bebida, esperando a ser recogida.
⸺Es prácticamente lo mismo. ¿Quieres tu café o no?
Había otra barista haciendo mi café mientras Harper se quedó de pie, cruzada de brazos.
⸺Necesitas prepararme otro latte ⸺dijo Harper.
Ella solo desplegó los brazos lo suficiente como para subir sus lentes que empezaban a deslizarse hacia abajo.
⸺No necesito hacer nada, señora ⸺dijo Skylar. Ella se volvió a la caja registradora⸺. ¡Siguiente!
La barista que preparaba mi café se acercó con el líquido bien caliente y le puso una tapa al vaso.
⸺Lincoln.
Harper me arrebató el vaso antes de que pudiera tomarlo.
⸺Llegaré tarde.
Ella robó mi bebida y salió rápidamente de la tienda, corriendo hasta su auto.
⸺Espero que le guste el café negro ⸺murmuré en voz baja.
La manera perfecta de comenzar mi día.
Debí haberme quedado en casa.
Recogí el almuerzo y conduje hasta la casa de Mason para asegurarme que estaba bien. Habían pasado un par de semanas desde que la mafia le había disparado al tratar de proteger a su novia del colegio, Hazel Agron.
Llegué a su casa y antes de que incluso levantara la mano para tocar, Hazel se precipitó a abrirla. Ella era más rápida que su mascota, Bear, a la cual habían adoptado luego de que el tío de Mason falleciera.
Hazel abrió la puerta y me abrazó.
⸺Gracias por venir ⸺susurró en mi oído.
⸺Por supuesto. Traje el almuerzo ⸺dije y levanté la bolsa de comida china para mostrársela.
Hazel me hizo pasar a la casa de Mason y cerró la puerta.
Le pasé la bolsa de comida y luego me quité el abrigo y las botas.
⸺Huele bien ⸺gruñó Mason mientras se levantaba del sofá⸺. ¿Qué trajiste?
⸺Carne a la naranja, pollo con sésamo, langostinos agridulces, carne a la Mongolia y unos cuantos aperitivos. No estaba seguro de lo que cada uno querría, así que traje diferentes opciones ⸺dije.
No había querido venir con las manos vacías y Hazel había estado ocupada cuidando de Mason. Ella merecía comer algo que no tuviera que cocinar.
⸺Me muero de hambre ⸺dijo Mason.
Él deambuló lentamente hasta la mesa; claramente afectado por las heridas infligidas por los dos disparos.
⸺¿Cómo va la reparación del restaurante? ⸺Preguntó Mason.
Hazel reveló el contenido de la bolsa de papel marrón, sacando todos los platos mientras yo hurgaba en las gavetas en búsqueda de cubiertos. Ya había platos desechables en la mesa y palillos chinos junto a cubiertos de plástico para comer.
⸺Lenta y prácticamente inexistente ⸺dije⸺. ¿Puedo traerles algo de tomar?
Había visitado a Mason lo suficiente a través de los años como para saber, no solo como estaba todo dispuesto, sino también en que gabinetes se encontraba todo.
⸺Agua está bien.
Tomé tres vasos del gabinete y los llené con agua.
⸺¿Cómo te has sentido? ⸺Pregunté dándome la vuelta para encarar a Mason, pero con la vista fija en el vaso para no hacer un desastre.
⸺Cansado, adolorido. Me siento como si me hubieran disparado dos veces.
Mason rió y tomó asiento con una aspereza que nunca le había visto cruzar el rostro. Él hizo una mueca de dolor, tratando de ocultar su incomodidad evidente.
⸺Ya me estoy sintiendo mejor y estoy ansioso de volver a la acción.
⸺¿Ya estás listo para correrme de Eagle Tactical? ⸺Pregunté bromeando a medias con él. Jaxson, uno de nuestros compañeros de las fuerzas especiales, seguía insistiendo en que me uniera.
Todos fuimos compañeros en el ejército y servimos juntos.
Solía ayudarlos en ocasiones cuando necesitaban un par de manos extras en un caso o cuando tenían un trabajo de campo.
⸺No, tú te quedas. Solo quiero volver al ruedo contigo de nuevo.
Lo cierto era que amaba el restaurante que era un éxito gracias a mi esfuerzo, pero volver a trabajar ahí tomaría meses.
El restaurante necesitaba muchas reparaciones. El comedor había sido destrozado por las múltiples balas que llovieron en el interior. Tenía a un agente de seguros trabajando conmigo para las reparaciones, pero tomaría tiempo. Traje dos vasos de agua a la mesa para Hazel y Mason. Llené de agua el tercer vaso y lo puse enfrente de mi plato, sentándome en la mesa de la cocina.
⸺Luces mejor ⸺dije. Toma tiempo sanar luego de ser disparado; hace falta fisioterapia para recuperar la movilidad, entre otras cosas.
Hazel permaneció en silencio mientras se servía el almuerzo en el plato frente a ella.
Mason gruñó.
⸺Estoy listo para salir de esta casa. Sin ofender a Hazel ⸺dijo él, dándole un vistazo⸺. Has hecho un gran trabajo al cuidarme. Es solo que no estoy acostumbrado a que cuiden de mí.
Hazel sonrió y le dio una palmadita en el brazo ileso.
⸺No me ofendiste y lo entiendo. Me encantaría salir y tomar algo, socializar.
Él siempre había sido independiente, incluso con las mujeres.
No puedo recordar que alguna novia de Mason viviera con él. Él era muy reservado cuando se trataba de sus relaciones, aunque lo había visto irse con una mujer del bar una o dos veces.
⸺Deberíamos hacer eso esta noche, ⸺dijo Mason.
⸺Se supone que aun no puedes beber ⸺le recordó Hazel. Y él se quejó en voz baja.
⸺Ella tiene razón ⸺dije, metiéndome en la conversación para apoyar a Hazel⸺. Solo queremos lo mejor para ti. No puedes beber si estás tomando analgésicos.
Tomé un sorbo de agua y puse el vaso de vuelta en la mesa de madera.
⸺Si quieres puedes salir esta noche por una hora, solo para salir de la casa y te puedo traer de vuelta.
El bar no estaba lejos de la casa de Mason. Era una distancia muy grande para que él la recorriera a pie ya que estaba herido, pero no me tomaría mucho tiempo llevarlo si quería reunirse con los chicos por una hora. Me preocupaba que, si lo hacía por más tiempo, se excedería y luego lo pagaría con creces.
Mason no era bueno en pedir ayuda. Él comió un poco de su almuerzo, su mirada estaba fija en la comida frente a él. No podía decir si estaba complacido con mi sugerencia, o me pediría que me fuera.
⸺Una hora es mejor que nada.
⸺¿Qué tal si todos nos reunimos después de la cena, pero un poco más temprano? ⸺Preguntó Hazel⸺. Así el bar no estará tan lleno.
Su mirada se encontró con la mía y ella no tenía que decir la verdadera razón por la que ella quería que fuéramos más temprano.
Ya lo presentía…
Mason estaría muy exhausto más tarde esa noche.
Él tenía círculos negros bajo sus ojos. Su cabello era un desastre, pero eso probablemente se debía a que no se había duchado hoy.
⸺Eso suena bien y estoy seguro de que los otros se apuntarán al plan también. Les mandaré un mensaje de texto, haciéndoles saber que deben reunirse con nosotros esta noche en el bar a las siete ⸺dije.
Terminé mi almuerzo.
Mason lucía molido y no quería que él sintiera que debía entretenerme o que debía quedarse despierto.
⸺Toma una siesta. Te veré esta noche ⸺dije. Ayudé a Hazel a recoger las sobras de comida y a ponerlas en el refrigerador.
Mason desapareció por el pasillo y se metió en su habitación para descansar.
⸺¿Cómo has estado? ⸺Pregunté en voz baja.
No quería molestar a Mason o que escuchara nuestra conversación.
⸺Ha sido demasiado ⸺dijo Hazel con su mirada puesta en la mesa de la cocina mientras tiraba los platos desechables sucios en la basura.
Tomé los pocos cubiertos y vasos y los llevé al fregadero para lavarlos.
No quería dejar un desorden con el que ella tuviera que lidiar. Ella ya tenía muchas cosas por hacer al cuidar a Mason.
⸺Él aprecia tu ayuda y que estés ahí para él, ya sea si te lo dice o no ⸺dije.
⸺Lo sé ⸺dijo Hazel. Ella limpió la mesa.
Me quedé frente al fregadero, esperando que el agua del grifo se calentera antes de llenarlo para lavar los platos que quedaron del almuerzo y unos cuantos más que quedaron del desayuno.
⸺No tienes que lavar los platos.
⸺Lo sé ⸺dije.
No me moví de mi lugar frente al fregadero. Una vez que el agua estaba tibia, le puse el tapón al drenaje y dejé que la parte vacía del fregadero se llenara de agua.
Hazel señaló debajo del fregadero.
⸺El detergente está ahí.
⸺Gracias. ⸺Ya sabía donde Mason tenía el detergente. Abrí el gabinete y agarré el líquido. Vertí unas cuantas gotas en el fregadero. La espuma se formó a medida que el agua fluía, creando burbujas⸺. ¿Cómo están las cosas entre tú y Mason?
⸺Están bien. ⸺Los ojos de Hazel se ampliaron y levantó la mirada para verme⸺. ¿Por qué? ¿Te ha dicho algo?
Frunció el ceño y arrastró los pies mientras se quedaba de pie en la cocina y parecía estar incómoda por mi pregunta.
No tenía intención de ofenderla o causar un problema entre ellos.
⸺No, solo sé que mudarse a una nueva ciudad puede ser difícil y también esta el hecho de que no conoces a nadie y estás atrapada aquí cuidando de Mason. Probablemente estás lidiando con mucho ahora.
⸺¿Qué eres? ¿Un psicólogo? ⸺Preguntó Hazel. Ella se cruzó de brazos.
⸺No, solo estoy acostumbrado a escuchar los problemas de la mayoría de los chicos. Mason solía hablar de ti bastante.
Quizás no debí decir nada, pero se me hacía difícil ignorar el hecho evidente de que ambos se gustaban mucho. Al menos sabía que a Mason le gustaba Hazel. No quería ver como ella se alejaba de él cuando él pudiera volver a cuidar de sí mismo eventualmente.
⸺¿En serio? ⸺Su voz se quedó atascada en su garganta⸺. ¿Qué decía? ⸺Ella se apoyó contra la encimera de la cocina y su mirada nunca me dejó a medida que lavaba los platos uno a uno.
⸺Él siempre comparó a las chicas con las que salía contigo. Él me contó como siendo joven y estúpido dejó que te marcharas lejos a la universidad.
⸺Nunca fui a la universidad.
⸺Oh. ⸺No sabía que responder a eso.
Ella era la chica con la que había ido a un internado y que después fue punto de comparación para las chicas que vinieron después. Aunque la mayoría de los chicos no había hablado tan abiertamente de sus pasados, Mason se arrepentía de dejarla ir.
⸺Se suponía ⸺dijo Hazel⸺, pero esa es una larga historia, prefiero que cambiemos de tema.
⸺Por supuesto.
⸺Mason es un buen hombre. Es solo que todo es demasiado ahora mismo; cuidar de él y hacer que esté lo más cómodo posible. Ni siquiera te contaré lo difícil que es meterlo en la ducha.
Me reí entre dientes.
⸺Mason es un tipo grande. ⸺Él era el doble del tamaño de Hazel⸺. No me estás pidiendo que lo bañe, ¿cierto?
Hazel sonrió.
⸺¿Lo harías?
⸺No.
Pensaba que ella estaba bromeando, pero, aun así, no me arriesgaría. Existían ciertas líneas que no cruzábamos.
Ella arrugó la nariz y se rio.
⸺Maldición. Valía la pena intentarlo.
Terminé de lavar los últimos platos y los puse a secar en el escurridor, apilándolos hasta rebosar.
⸺¿Hay algo más en lo que te pueda ayudar aquí? Aparte de bañar a tu novio.
Hazel negó con la cabeza.
⸺Lo tengo bajo control. Limpiaré el lugar mientras Mason toma una siesta. No puedo esperar a que salgamos esta noche. Luego no me lo eches en cara si me emborracho esta noche.
⸺Mientras no conduzcas.
Sus ojos brillaron de felicidad, algo que no había visto durante todo el tiempo que me quedé para almorzar.
El pensamiento de salir y socializar parecía haber cambiado su humor para mejor. Con suerte, también ayudaría a Mason.
Llegué temprano al bar para asegurarme de conseguir una cabina en la que nos pudiéramos sentar juntos.
Había una cabina en la esquina del bar que acomodaría fácilmente a nuestro grupo. La reclamé antes de que alguien más pudiera hacerlo y aunque quería una cerveza, esperaría a que uno de los otros chicos llegara y cuidara nuestra mesa para así ir hasta la barra.
⸺¡Jaxson!
Le hice un gesto con la mano cuando él entró al bar y empezó a buscar al resto de nosotros.
⸺¿Dónde está Ariella? ⸺Pregunté mientras él se sentaba frente a mí en la cabina.
Sus ojos se estrecharon.
⸺¿Qué? Es algo entre nosotros dos. ⸺Ya sabían que se estaban acostando, pero no se suponía que el resto de la oficina lo supiera.
Él era su jefe. Técnicamente, todo el equipo de Eagle Tactical eran los jefes de Ariella, pero Jaxson se estaba acostando con ella. Ellos también vivían juntos, pero eso no era porque estuvieran juntos. Esa decisión fue el resultado de que su casa se había incendiado unos meses atrás.
⸺No lo sé. Ariella llegará pronto. ⸺Jaxson puso las manos sobre la mesa de madera⸺. Pensamos que sería una buena idea que apareciéramos separados.
⸺¿Todo esta bien en el paraíso?
No había notado ningún problema, pero ellos eran muy buenos en mantener su relación oculta.
Lo cual era irónico ya que Jaxson se había mostrado irritable y malhumorado durante el breve periodo de tiempo en el que trabajaron juntos antes de que empezaran a dormir juntos.
Ella lo hacía feliz y si los otros chicos no podían verlo, estaban ciegos.
Jaxson señaló con la cabeza hacia la puerta donde entraba Declan junto a Mason y Hazel siguiéndolo detrás.
Salí de la cabina.
⸺Iré por unas bebidas ⸺dije.
El bar ya estaba lleno y los clientes esperaban por sus bebidas. Me apoyé en contra de la barra y me crucé de brazos, esperando mi turno.
Una voz suave se aclaró la garganta junto a mí mientras se apresuraba hasta la barra y se sentaba en el banquillo disponible.
La ladrona del café.
Le había hecho un gesto al barman para que me atendiera después, pero él no había venido a tomar mi orden todavía.
⸺¡Tú! ⸺dije, posando la mirada en la chica que me había arrebatado mi café caliente y me había dejado de mal humor en la mañana.
Ella rió suavemente y evitó mi mirada. Su cabello largo le cubría parte del rostro, ocultándolo de mí. ¿Era a propósito?
El barman se acercó a mí.
⸺¿Qué te puedo servir? ⸺Preguntó él.
⸺Déjame comprarte una bebida ⸺dijo Harper y ella se giró sobre el banquillo para verme.
Quería meter el largo mechón de cabello detrás de su oreja, pero mantuve las manos quietas.
⸺Quiero una cerveza de barril ⸺le dije al barman⸺. La que sea que tengas.
Aunque me había acercado a la barra para pedir las bebidas de todos, me encontré interesado en la nueva chica misteriosa que había aparecido en Breckenridge.
¿Estaba de vacaciones aquí como todos los que venían al pueblo?
Harper tomó la tarjeta de crédito de su monedero y la deslizó a través del mostrador de la barra hacia el barman.
⸺Va de mi cuenta. Yo tendré un vodka con naranja.
El barman sirvió mi cerveza primero y luego preparó el vodka con naranja de Harper.
Aunque no me gustaba que una mujer pagara por mi bebida o que pagara mi cena, Harper se había metido bajo mi piel esta mañana. Lo mínimo que ella podía hacer era disculparse, y dado que eso no estaba sucediendo, me conformaría con una cerveza de barril.
⸺Gracias ⸺le dije a ella, tomando un sorbo de mi cerveza. El banquillo al lado de Harper estaba disponible.
Miré de vuelta a mis amigos. Ellos me estaban dando un pulgar arriba cuando notaron que hablaba con Harper.
⸺Es lo menos que puedo hacer luego de esta mañana ⸺dijo Harper⸺. Soy un peligro antes de tener mi café.
Me senté en el banquillo y me moví para encararla.
⸺Ya somos dos.
Ella no era la única que lidiaba con el peligro, pero me contuve de decir algo.
Ella no necesitaba conocer mi vida, quién era yo o lo que hacía para ganarme la vida. Me gustaba contar con el factor misterioso una vez.
Harper no sabía nada de mí y podía mantenerlo de esa manera.
El barman le entregó el vodka con naranja a Harper y ella tomó un sorbo del liquido naranja; sus ojos se contraían con cada sorbo. ¿No estaba acostumbrada a una bebida tan fuerte? Ella solo había pedido vodka con jugo de naranja.
⸺¿Qué estás haciendo en Breckenridge? ⸺Pregunté.
La mayoría de los turistas venían en el invierno para practicar esquí y snowboarding. Era común que viniera gente a practicar deportes acuáticos como el rafting y el piragüismo en el verano, pero todo estaba tranquilo y calmado durante la primavera.
⸺Vine a hacer volar en mil pedazos al pueblo.
Harper
Lo había visto entrar al bar; el hombre guapo al que le había robado el café en la cafetería en la mañana.
No pude evitar sentir la rabia que me hizo hervir la sangre mientras esperaba por mi chute de cafeína. Como si no hubiera sido lo bastante malo que la chica detrás de la caja registradora había sido grosera y me había cobrado de más, también se había equivocado con mi nombre.
Luego él entró y le sonrió a ella. Una sola mirada y ella era masilla en sus manos.
¿Eran una pareja? Asqueroso. Quería vomitar. Y también realmente quería mi café.
La barista ya le estaba preparando lo que sea que él había pedido, pero el mío no estaba por ningún lado, y ellas no me habían llamado para avisarme que estaba listo.
Había sido una mocosa malcriada y le había robado su café caliente. Lo había hecho miles de veces en el set del estudio, pero esto no era un estudio cinematográfico. Había sido estúpida y grosera. Y el café era horrible. Amargo y fuerte; me lo tenía merecido.
Había pasado el día en mi habitación de motel.
No había rentado un lugar en el complejo turístico donde leí que el alojamiento era más lujoso.
Mi agente había arreglado que me quedara en esa pocilga así nadie me reconocería. Apestaba. Mi día había sido malo esa mañana sin café y luego fue peor cuando descubrí que los ejecutivos del estudio habían decidido contratar a un equipo de seguridad privado para mantenerme lejos de los problemas.
Me gustaban los problemas.
Al menos eso es lo que el estudio y la prensa reseñaba.
Me había creado una reputación como “la zorra”. No había sido difícil y mi agente me había dicho que no tener publicidad, era una mala publicidad.
¿Era eso cierto?
Me habían ofrecido unos cuantos papeles nuevos en películas y me habían mencionado en todos los programas de entretenimiento y en las revistas casi regularmente. Yo era la chica sobre la que tu madre te advirtió. La que robó a tu novio y se acostó con un hombre solo para jugar con él. Excepto que esa no era la verdadera yo.
Aún podía contar con los dedos de una mano la cantidad de hombres con los que había dormido en mi vida.
Era tímida, introvertida y odiaba estar sola.
El resto era una actuación. Era una suerte que fuera una actriz y una condenadamente buena.
Había engañado a todo el mundo y en algún punto del camino me había engañado a mí misma al creer que era feliz.
Me senté sola en una mesa y tomé lentamente mi bebida, un vodka con naranja. Quería parecer ruda. No podía tomar nada que fuera femenino, aunque eso es lo que hubiera preferido.
Alguien podría reconocerme en cualquier momento y tomar una foto de Harper Madison. Estaría en las redes sociales en un segundo. Debía andar con cuidado.
Cuando lo vi a él entrar al bar con un propósito en mente. Él caminó hasta la cabina de la esquina, la más grande que había, y se sentó ahí.
No pude evitar mirarlo fijamente, paralizada.
Quería acercarme y entablar una conversación con él para disculparme por haber sido una mocosa esa mañana, pero no pude moverme de mi posición.