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EL ALCALDE DE ZALAMEA (EDICION EXTENDIDA Y ANOTADA) - POR PEDRO CALDERON DE LA BARCAEl Alcalde De Zalamea es una obra teatral del Siglo de Oro escrita por Pedro Calderón de la Barca. La trama se centra en Pedro Crespo, un humilde campesino que se ve obligado a enfrentarse a las autoridades militares después de que su hija es deshonrada por el capitán Don Álvaro. A medida que los eventos se desarrollan, Crespo, convertido en alcalde, lucha por defender su honor y justicia, enfrentando las tensiones entre el poder militar y el civil. La obra explora temas de honor, justicia, poder y las diferencias entre clases sociales, mientras desafía las normas establecidas en su época.ACERCA DE ESTA EDICIÓN COMENTADAEsta edición especial de «El Alcalde De Zalamea» ha sido cuidadosamente ampliada para incluir las principales lecciones de vida extraídas de este extraordinario libro. Cada lección, extraída del rico tapiz de la novela, ofrece una visión más profunda de los temas principales de la obra y su relación con nosotros mismos, la sociedad y la cultura. Estas reflexiones enriquecen el texto original, proporcionando a los lectores valiosas perspectivas que resuenan más allá de la narración, haciendo de esta edición una lectura obligada tanto para los nuevos lectores como para los que regresan.CONTENIDOPersona Es Que Hablan En Esta ObraJornada PrimeraJornada SegundaJornada TerceraLecciones ClaveGuía De Ejercicios
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El Alcalde De Zalamea - Edicion Extendida Y Anotada
por PEDRO CALDERON DE LA BARCA
©2024/PEDRO CALDERON DE LA BARCA.
Todos los derechos reservados.
Contacto:
34744 Emerald Coast Parkway, Destin, FL 32541
ISBN: 9781300971399
ELALCALDEDEZALAMEA
EDICION EXTENDIDA Y ANOTADA
POR
PEDROCALDERONDELABARCA
ACERCA DE ESTA EDICIÓN COMENTADA
Esta edición especial de «El Alcalde De Zalamea» ha sido cuidadosamente ampliada para incluir las principales lecciones de vida extraídas de este extraordinario libro. Cada lección, extraída del rico tapiz de la novela, ofrece una visión más profunda de los temas principales de la obra y su relación con nosotros mismos, la sociedad y la cultura. Estas reflexiones enriquecen el texto original, proporcionando a los lectores valiosas perspectivas que resuenan más allá de la narración, haciendo de esta edición una lectura obligada tanto para los nuevos lectores como para los que regresan.
PERSONAESQUEHABLANENESTAOBRA
JORNADAPRIMERA
JORNADASEGUNDA
JORNADATERCERA
LECCIONES CLAVE
GUÍA DE EJERCICIOS
El Rey, Don Felipe II DonLopeDeFigueroa
DonÁlvaroDeAtayde,Capitán Un Sargento
Soldados
Rebolledo, Soldado La Chispa, Soldadera PedroCrespo,Labrador
Juan, Hijo De Pedro Crespo Isabel,HijaDePedroCrespo Inés, Prima De Isabel
DonMendo,HidalgoGracioso Nuño, Criado De Don Mendo Un Escribano
Villanos
REBOLLEDO:¿CuerpodeCristoconquien de esta suerte hace marchar
deunlugaraotrolugar sin dar un refresco!
TODOS:¡Amén!
REBOLLEDO:¿Somosgitanosaquí, para andar de esta manera?
¿Unaarrolladabandera nos ha de llevar tras sí con una caja…
SOLDADO1:¿Yaempiezas?
REBOLLEDO:…queesteratoquecalló nos hizo merced de no
rompernos estas cabezas?
SOLDADO2:Nomuestresdeesopesar, si ha de olvidarse, imagino,
elcansanciodelcamino a la entrada del lugar.
REBOLLEDO:¿A qué entrada, si voy muerto?
Yaunquelleguevivoallá sabe mi Dios si será
paraalojar;puesescierto llegar luego al comisario los alcaldes a decir,
quesiesquesepuedenir, que darán lo necesario.
Responderle lo primero
queesimposible,queviene la gente muerta; y, si tiene el concejo algún dinero, decir, "Señores, soldados, orden hay que no paremos;
luegoalinstantemarchemos." Y nosotros, muy menguados, a obedecer al instante
orden,quees,encasotal, para él orden monacal,
y para mi mendicante.
Pues,¡votoaDios!,quesillego esta tarde a Zalamea,
y pasar de allí desea
por diligencia o por ruego, quehadesersinmílaida; puesno,condesembarazo será el primero tornillazo
que habré yo dado en mi vida.
SOLDADO1:Tampocoseráelprimero, que haya la vida costado
aunmiserablesoldado; ymáshoy,siconsidero,
queeselcabodeestagente don Lope de Figueroa,
que, si tiene tanta loa
deanimosoydevaliente la tiene también de ser
elhombremásdesalmado, jurador y renegado
delmundo,yquesabehacer justicia del más amigo,
sin fulminar el proceso.
REBOLLEDO:¿Venustedestodo eso?
Pues yo haré lo que yo digo.
SOLDADO2: ¿De eso un soldado blasona?
REBOLLEDO:Pomímuypocomeinquieta; sino por esa pobreta
que viene tras la persona.
CHISPA:SeorRebolledo,pormí vuecé no se aflija, no;
quebiensesabequeyo barbada el alma nací;
y ese temor me deshonra, pues no vengo yo a servir menos, que para sufrir trabajos con mucha honra; queparaestarme,enrigor, regalada, no dejara
enmivida,cosaesclara, la casa del regidor, donde todo sobra, pues
al mes mil regalos vienen; quehayregidores,quetienen menos regla con el mes;
y pues a venir aquí a marchar y perecer
conRebolledo,sinser postema, me resolví,
por mí ¿en qué duda o repara?
REBOLLEDO:¡Vivenloscielos,queeres corona de las mujeres!
SOLDADO2: Aquesa es verdad bien clara.
¡VivalaChispa!
REBOLLEDO:¡Reviva!
Ymás,si,pordivertir esta fatiga de ir
cuestaabajoycuestaarriba, con su voz al aire inquieta una jácara o canción.
CHISPA:Respondaaesapetición citada la castañeta.
REBOLLEDO:Y yo ayudaré también.
Sentencienloscamaradas todas las partes citadas.
SOLDADO1:¡ViveDios,quehandichobien!
CHISPA:"Yosoytiritiritaina, flor de la jacarandana.
REBOLLEDO:"Yosoytiritiritina, flor de la jacarandina.
CHISPA:"Vayaalaguerraelalférez, y embárquese el capitán.
REBOLLEDO:"Matemorosquienquisiere; que a mí no me han hecho mal.
CHISPA:"Vayayvengalatablaalhorno, y a mí no me falte pan.
REBOLLEDO:"Huéspeda,mátemeunagallina, que el carnero me hace mal."
SOLDADO1: Aguarda; que ya me pesa
—que íbamos entretenidos ennuestrosmismosoídos—, caballeros, de ver esa
torre, pues es necesario que donde paremos sea.
REBOLLEDO:¿Es aquélla Zalamea?
CHISPA:Dígalosucampanario.
No sienta tanto vusté, queceseelcanticoya; mil ocasiones habráen lograrle; porque esto me divierte tanto,
quecomodeotrasnoignoran, que a cada cosa lloran,
yo a casa cosica canto,yoiráucéjácarasciento.
REBOLLEDO:Hagamosaquíalto,pues justo, hasta que venga, es
con la orden el sargento,
porsihemosdeentrarmarchando o en tropas.
SOLDADO2:Élsoloesquien llega ahora. Mas también
elcapitánesperando está.
ÁLVARO:Señoressoldados, albricias puedo pedir;
deaquínohemosdesalir, y hemos de estar alojados hastaquedonLopevenga con la gente, que quedó en Llerena; que hoy llegó orden de que se prevenga toda, y no salga de aquí
aGuadalupe,hastaque juntotodoeltercioesté, y él vendrá luego; y así
delcansanciobienpodrán descansar algunos días.
REBOLLEDO:Albricias pedir podías.
TODOS:¡Vítornuestro capitán!
ÁLVARO:Yaestáhechoelalojamiento.
El comisario irá dando boletas,comollegando fueren.
CHISPA:Hoysaberintento, por qué dijo, voto a tal, aquella jacarandina;
"Huéspeda,mátemeunagallina; que el carnero me hace mal."
ÁLVARO:Señorsargento,¿haguardado las boletas para mí
que me tocan?
SARGENTO:Señor,sí.
ÁLVARO:¿Ydóndeestoyalojado?
SARGENTO:Enlacasadeunvillano, que el hombre más rico es
del lugar, de quien después he oído, que es el más vano
hombredelmundo,yquetiene más pompa y más presunción, que un infante de León.
ÁLVARO:Bienaunvillanoconviene rico aquesa vanidad.
SARGENTO:Dicen,queestaeslamejor casa del lugar, señor;
ysivaadecirverdad, yo la escogí para ti,
no tanto porque lo sea, comoporqueenZalamea no hay tan bella mujer…
ÁLVARO:Di.
SARGENTO:…comounahijasuya.
ÁLVARO:Pues,
¿pormuyhermosaymuyvana será más que una villana
con malas manos y pies?
SARGENTO:¡Quehayaenelmundoquiendiga eso!
ÁLVARO:¿Puesno,mentecato?
SARGENTO:¿Haymásbiengastadorato
—aquienamornoleobliga, sino ociosidad no más— que el de una villana, y ver, que no acierta a responder a propósito jamás?
ÁLVARO:Cosaesqueentodamivida, ni aun de paso, me agradó;
porqueennomirandoyo aseada y bien prendida
una mujer, me parece que no es mujer para mí.
SARGENTO:Puesparamí,señor,sí, cualquiera que se me ofrece.
Vamosallá;queporDios, quemepiensoentretener con ella.
ÁLVARO:Quieressaber
¿cuáldicebiendelosdos? El que una belleza adora, dijo, viendo a la que amó,
«Aquella es mi dama,» y no,
«Aquella es mi labradora.»
Luego si dama se llama
la que se ama, claro es ya, que en una villana está vendidoelnombrededama. Mas…, ¿qué ruido es ese?
SARGENTO:Unhombre, que de un flaco rocinante
alavueltadeesaesquina seapeó,yenrostroytalle parece aquel Don Quijote
dequienMigueldeCervantes escribió las aventuras.
ÁLVARO:¡Quéfiguratannotable!
SARGENTO:Vamos,señor;queyaeshora.
ÁLVARO:Llévemeelsargentoantes a la posada la ropa,
y vuelva luego a avisarme.
MENDO:¿Cómo va el rucio?
NUÑO:Rodado,
pues no puede menearse.
MENDO:¿Dijisteallacayo,di, que un rato le pasease?
NUÑO:¡Qué lindo pienso!
MENDO:No hay cosa
que tanto a un bruto descanse.
NUÑO:Aténgome a la cebada.
MENDO:¿Yquealosgalgosnoaten, dijiste?
NUÑO:Ellosseholgarán mas no el carnicero.
MENDO:Baste;
ypuesquehandadolastres, cálzome palillo y guantes.
NUÑO:¿Siteprendenelpalillo por palillo falso?
MENDO:Si alguien,
quenohecomidounfaisán, dentro de sí imaginare,
quealládentrodesímiente, aquí y en cualquiera partelo sustentaré.
NUÑO:¿Mejor
no sería sustentarme
amíquealotro,queenfin te sirvo?
MENDO:¡Quenecedades! En efecto, ¿que han entrado soldados aquesta tarde
en el pueblo?
NUÑO:Sí, señor.
MENDO:Lástimadaelvillanaje con los huéspedes que espera.
NUÑO:Máslástimadaymásgrande con los que no espera…
MENDO:¿Quién?
NUÑO:Lahidalguez,ynoteespante; que, si no alojan, señor,
en casa de hidalgos a nadie,
¿por qué piensas que es?
MENDO:¿Por qué?
NUÑO:Porque no se mueran de hambre.
MENDO:Enbuendescansoestéelalma de mi buen señor y padre,
puesenfinmedejóuna ejecutoria tan grande, pintada de oro y azul, exención de mi linaje.
NUÑO:Tomáramosquedejara un poco del oro aparte.
MENDO:Aunque,sireparoenello, y si va a decir verdades,
no tengo que agradecerle
dequehidalgomeengendrase; porque yo no me dejara engendrar, aunque él porfiase, sino fuera de una hidalgo,
en el vientre de mi madre.
NUÑO: Fuera de saber difícil.
MENDO:Nofuera,sinomuyfácil.
NUÑO: ¿Cómo, señor?
MENDO:Túenefecto filosofía no sabes,
y así ignoras los principios.
NUÑO:Sí,miseñor,yaunlosantes y postres, desde que como
contigo;yes,quealinstante mesa divina es tu mesa,
sin medios, postres ni antes.
MENDO:Yonodigoesosprincipios.
Hasdesaberqueelquenace sustancia es del alimento,
que antes comieron sus padres…
NUÑO:¿Luego tus padres comieron?
Esa maña no heredaste.
MENDO:…estodespuésseconvierte en su propia carne y sangre;
luego si hubiera comido elmíocebolla,alinstante me hubiera dado el olor, yhubieradichoyo,"Tate,
quenomeestábienhacerme de excremento semejante."
NUÑO:Ahora digo que es verdad.
MENDO:¿Qué?
NUÑO:Queadelgazalahambre los ingenios.
MENDO:Majadero,
¿téngola yo?
NUÑO: No te enfades; que,sinolatienes,puedes tenerla; pues de la tarde
sonyalastres,ynohaygreda, que mejor las manchas saque, que tu saliva y la mía.
MENDO:Pues,¿esaescausabastante para tener hambre yo?
Tenganhambrelosgañanes; que no somos todos unos; que a un hidalgo no le hace falta el comer…
NUÑO:¡Ohquiénfuera hidalgo!
MENDO:Ymásnomehables de esto, pues ya de Isabel vamos entrando en la calle.
NUÑO:¿Porqué,sideIsabeleres tan firme y rendido amante,
a su padre no la pides? Puesconestotúysu