Breviario político de psicoanálisis - Jorge Alemán - E-Book

Breviario político de psicoanálisis E-Book

Jorge Alemán

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Beschreibung

«Cuando un pueblo entiende que a veces la ley no es la ley, sino un instrumento arbitrario del poder, ha realizado una operación subjetiva y política de primer orden». Una vez más, Jorge Alemán cuestiona el discurso capitalista con un golpe de reescritura, en forma de breviario, sobre sus libros anteriores. Su Breviario discurre sobre distintas lecturas, interpretaciones y temas cruciales de la actualidad que indagan hasta donde lo político y el psicoanálisis —sin superponerse nunca— entran en un mutuo juego de correspondencias. Al mismo tiempo, logra atar los cables sueltos de sus formulaciones teóricas con el legado de Marx, Freud, Heidegger y Lacan. El célebre psicoanalista y escritor nos brinda así un repertorio de conceptos clave donde amalgama varias secuencias (amor y acontecimiento; machismo; lenguaje inclusivo; el Mal) que van desde sus lecturas sobre la forma neoliberal del Capital hasta el modo en que éstas impactan sobre la vida y las circunstancias sociales y subjetivas. Una obra que se puede leer por bloques temáticos siguiendo el orden sugerido o bien de manera aleatoria, ya que cada una de sus entradas constituyen una unidad en sí misma.

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© Jorge Alemán, 2022

Corrección: Marta Beltrán Bahón

© De la imagen de cubierta: Papo Kling

Montaje de cubierta: Juan Pablo Venditti

Derechos reservados para esta edición

© Ned Ediciones, 2022

Preimpresión: Editor Service, SL

www.editorservice.net

eISBN: 978-84-18273-91-9

La reproducción total o parcial de esta obra sin el consentimiento expreso de los titulares del copyright está prohibida al amparo de la legislación vigente.

Ned Ediciones

www.nedediciones.com

ÍNDICE

HILOS

DISCURSO CAPITALISTA Y AMOR

IMPERATIVOS DE RENDIMIENTO Y SUPERYÓ

INERCIA Y DISCURSO

EL ANTICAPITALISMO DELEUZIANO

NO HAY CAPITALISMO SIN GUERRA

CAPITALISMO AUTORITARIO O CAPITALISMO DEMOCRÁTICO

LACAN Y LA COMUNICACIÓN EN EL CAPITALISMO

DERECHOS HUMANOS, EMANCIPACIÓN Y SUJETO

PLUSVALÍA DE LA INFORMACIÓN

LAWFARE

EL PSICOANÁLISIS NO ES UNA ANTROPOLOGÍA

REPRESIÓN INCONSCIENTE VERSUS REPRESIÓN SOCIAL

EDIPO

AMOR Y ACONTECIMIENTO

MASCULINO/FEMENINO

«AMARSE A UNO MISMO»

DERRIDA. LA DECONSTRUCCIÓN

ELLO SE DECONSTRUYE

LA SECUENCIA DELEUZE

HORIZONTE DEL PSICOANÁLISIS

LO QUE EL PSICOANÁLISIS ENSEÑA. UN TESTIMONIO

LACAN, LA MIRADA Y EL ATEÍSMO

CRÍTICAS AL PSICOANÁLISIS

UNA IZQUIERDA LACANIANA Y HEIDEGGER

SUPERHOMBRE

SINGULARIDAD DEL SER PARA LA MUERTE. CAMPOS DE EXTERMINIO

EL MAL

ANTECEDENTE DE SOLEDAD: COMÚN

LECTURAS Y NO-TODO

ANTIFILOSOFÍA CONTEMPORÁNEA

CRISTO Y EL MASOQUISMO.UNA CONJETURA

DUELO IMPOSIBLE

IDENTIDAD Y VÍCTIMA

EXILIO

ACTOS SUBVERSIVOS

VACÍO E INVENCIÓN POLÍTICA

LA PREGUNTA POR LA DEMOCRACIA

SOLEDAD: COMÚN

POPULISMO/LACLAU

EL DUELO DE LA IZQUIERDA

LIBERTAD Y ELECCIÓN FORZADA

ELEGIR LA PULSIÓN DE MUERTE

ULTRADERECHA LIBERTARIA

EL COMUNISTA ITALIANO

MAQUIAVELO Y FREUD: LAS MALAS NOTICIAS

GUERRA FRÍA Y ACTUALIDAD

MACHISMO

NO HAY RELACIÓN SEXUAL Y POLÍTICAS DE GÉNERO

LENGUAJE INCLUSIVO

FILOSOFÍA Y SEXUACIÓN

DISPUTAR LO UNIVERSAL

MANAGEMENT DEL ALMA. DE LA EMPATÍA A LA RESILIENCIA

VERGÜENZA

RESPONSABILIDAD

UN NUEVO INDIVIDUALISMO

LOCURA/DEBILIDAD MENTAL

LA INCLINACIÓN RACISTA

PRESENTE Y ARTE DE ENVEJECER

LOS ÚNICOS HOMBRES DE VERDAD QUE NOS QUEDAN

AGRADECIMIENTOS

Bibliografía

«Todo orden, todo discurso que se emparente con el capitalismo deja de lado, amigos míos, lo que llamaremos, simplemente, las cosas del amor».

J. Lacan, Hablo a las paredes

HILOS

Comencé con Althusser leyendo a Marx y de allí, de inmediato, fui a Lacan, porque el pensador marxista proponía una lectura materialista del mismo. Ya había leído a Freud en mi primera juventud y tuve que lidiar con el pesimismo antropológico del inventor del psicoanálisis siendo un joven de izquierda. Sentí gran curiosidad por Heidegger gracias a un profesor de mi universidad. ¿Cómo podía ser que el pensador que había colaborado con el nazismo fuera el que presentaba algunas de sus claves más importantes? ¿Cómo atravesar el rechazo espontáneo que el pensador alemán producía en alguien involucrado en la militancia de los años 1970, exiliado de una dictadura genocida? Leí antes Qué significa pensar que Ser y tiempo, y construí con mi amigo Sergio Larriera la pasión por Lacan: Heidegger, de la cual distintos libros dieron cuenta. Esta operación generó la posibilidad de establecer una relación de consulta e intercambio con los grandes lectores españoles de Heidegger.

En 1978 asistí al Seminario de Lacan y lo vi absolutamente atravesado por la escritura del nudo. A pesar de la opacidad de su discurso, supe que los redondeles de hilo dejaban en el calce central un vacío irreductible a un punto euclideo en el plano y que los tres necesitaban un cuarto para sostenerse.

Después de haber fundado en 1980 Serie psicoanalítica, primera asociación lacaniana de Madrid con su correspondiente publicación —«Para ser serio hay que hacer Serie» (Lacan)—, y de captar otras consecuencias del vacío, comencé mi análisis con Jacques Alain Miller.

Participé luego de la fundación del Campo Freudiano y posteriormente de su vertiente institucional, la Asociación Mundial de Psicoanálisis.

Sin embargo, mi relación con lo político en psicoanálisis continúa siendo hasta hoy —de ahí este breviario— portador de mis propias marcas históricas.

«Artefactos intrascendentes» fue el término que elegimos junto a Larriera para diferenciarlos de los esquemas trascendentales kantianos. Estas cuestiones topológicas nos remitieron a Razón fronteriza y sujeto del inconsciente, y la amistad de años con Eugenio Trías se conjugó con un gran compromiso teórico con el problema del Límite.

A partir de esto el juego siempre fue un envite desafiante entre Marx, Freud y Heidegger, y, desde Lacan, se intentó hacer un nudo con los otros tres. Nunca se suman ni se integran ni se totalizan, a causa del vacío que los convoca.

Todo lo que vino después con los llamados teóricos de la emancipación, especialmente Ernesto Laclau —con quien compartí horas de trabajo y amistad—, pasaron por esa criba de los cuatro pensadores.

Este breviario se presenta como un golpe de reescritura sobre mis libros anteriores: Lacan: Heidegger; Soledad: Común; Capitalismo. Crimen perfecto o Emancipación; Ideología, Nosotras en la época. La época en nosotros.

Este Breviario discurre sobre distintas lecturas, interpretaciones y temas de época que indagan hasta donde lo político y el Psicoanálisis —sin superponerse nunca— entran en un mutuo juego de correspondencias Recoge un repertorio de temas cruciales de la actualidad. En él se amalgaman distintas secuencias que van desde mis lecturas sobre la forma neoliberal del Capital hasta el modo en que estas impactan sobre la vida y las circunstancias sociales y subjetivas. Los hilos sueltos de mis libros anteriores convocaron a esta tarea pendiente y nueva, a otro modo de decir y a ciertas reinvenciones posibles.

Este texto puede leerse o bien en el orden sugerido que agrupa distintos bloques temáticos o de manera aleatoria, ya que cada una de sus entradas constituyen una unidad en sí misma. Que el lector decida.

DISCURSO CAPITALISTA Y AMOR

Cuando los lacanianos tratan el tema del amor deben afrontar las distintas consecuencias de la denominada imposibilidad de la relación sexual (no hay relación-proporción entre el goce de cada uno de los partenaires). El amor es una respuesta a esa imposibilidad, por ello la experiencia amorosa no puede tener lugar en términos de complementariedad o completud. El amor se realiza con las suplencias que cuidan y a la vez hacen obstáculo a esa imposibilidad.

¿Cuál sería entonces el amor menos tonto? El recíproco. Pero sólo si se entiende por recíproco lo que no es completo, transparente y sin obstáculo; un coraje que no sólo no retrocede frente a la diferencia absoluta, sino que la pone a trabajar.

Esto vale para cualquier género del LGTBI+; por ello el amor es un acontecimiento político.

Si Lacan llegó a afirmar que en el discurso capitalista se realizaba un rechazo del amor, no lo hizo desde ninguna posición humanista. El empuje circular del discurso capitalista donde se conectan el sujeto y un plus de goce que sólo se calma para renovar una falta insaciable obstaculiza que se desplieguen las condiciones del amor.

El amor está cada vez más sometido y subordinado a dispositivos de rendimiento donde hay que dar la talla y presentarse sin ninguna falta. El neoliberalismo lo rechaza porque exige el límite y la indagación del misterio. De aquello que a la vez que se revela, se sustrae. En cambio, el empuje del neoliberalismo es que todo se haga visible, que todo sea comunicable, que todo pueda ser medido, calculable y evaluable. En el proyecto del capitalismo existe el propósito de programar las relaciones y borrar el carácter contingente del encuentro.

El amor es el encuentro entre dos faltas que nunca se pueden colmar. Se busca al otro para que acompañe en esta falta y no para que la colme.

La pareja es el desafío de soportar juntos algo que no se puede resolver.

IMPERATIVOS DE RENDIMIENTO Y SUPERYÓ

En la lógica de la izquierda lacaniana nunca se puede afirmar que el inconsciente sea exclusivamente la interiorización de las relaciones de poder. Esa posición teórico-ideológica simplifica la cuestión de tal modo que el inconsciente termina siendo una página en blanco interna y subterránea donde el poder escribe sus historias.

El inconsciente es una estructura con sus propias leyes específicas, las cuales se manifiestan bajo el modo de síntomas y fantasmas.

La única instancia que permite anudar al inconsciente con los dispositivos de poder —que también están construidos por su propia lógica— es el Superyó. Con sus exigencias obscenas, obligando a gozar al sujeto de su propia renuncia, es la huella de la civilización en el inconsciente. Destruyendo la oposición interior/exterior, el Superyó está al mismo tiempo afuera y adentro del sujeto y redobla sus exigencias imposibles de cumplir.

Los distintos imperativos de rendimiento que bajo el neoliberalismo intervienen en todas las facetas de la existencia humana —amor, deporte, sexualidad, trabajo— dependen de sus exigencias como una herramienta determinante. Todas estas exigencias están más allá del principio de placer y constituyen el plus de goce. El plus de goce no debe confundirse con la satisfacción homeostática del placer; por el contrario, encarna al desequilibrio de las pulsiones y su correlato con la pulsión de muerte del que el neoliberalismo se apropia.

Marx tuvo una intuición del problema cuando afirmó que el capitalista no acumula el goce, sino que goza acumulando. Gozar acumulando es estar ya bajo la exigencia del imperativo. Esta presencia de la exigencia de rendimiento en ambas puntas del antagonismo entre explotados y explotadores no lo anula en absoluto, pero le otorga una nueva complejidad a la versión clásica de la lucha de clases.

INERCIA Y DISCURSO

Cada discurso lleva en su matriz una fatalidad insuperable. Al comienzo mantiene su novedad disruptiva, su condición de corte, su apertura a otro modo de pensar y habitar la lengua. Pero lentamente, a medida que circula y se organiza su transmisión, va tomando forma en su ejercicio una «lengua de madera».

La tendencia inconsciente a la compulsión a la repetición se infiltra en la novedad de los discursos con la inercia que propicia el significante Amo. Éste es el estrago de la repetición y su inercia, que afecta al núcleo de todas las instituciones y que produce un cierre ideológico y una marca identitaria como signo de pertenencia a un grupo.

Ya no descubre ni sorprende a nadie, pero se constituye en un rasgo de distinción. Esta cuestión se vuelve patente en muchos discursos contemporáneos, muy potentes en sus primeras emergencias, hasta que se vuelven una parodia de sus gramáticas y al final se convierten en letra muerta.

Pasar la prueba implica que un suplemento poético cobre existencia en el sujeto que atraviesa la fijación de aquellas significaciones, siempre a punto de ser capturadas por un goce inerte.